Solscilcio

Introducción

El presente trabajo representa una reseña histórica y evolutiva de las relaciones entre el Estado y la Iglesia en México, desde sus inicios como un país independiente de la corona Española, el cual a lo largo de su historia y estructuración política, jurídica y social a travesado por múltiples documentos considerados Constituciones en su tiempo y época hasta llegar a laConstitución de 1917 que aun hoy en día rige nuestro país y que tanto en esta como en las anteriores se han incluido leyes y reformas que especifican la relación entre el Estado mexicano y su Iglesia.
Se abordaran los preceptos más representativos de las constituciones, reformas y leyes que dieron fundamento a la relación actual entre estas dos entidades, así como el de sus principales promotores a lolargo de su evolución, contemplando a la iglesia como gran participe de los intereses políticos del país.
Cabe señalar que la expresión de relación entre la iglesia y el Estado, proviene del siglo XIX frente al Estado absolutista. Sin embargo, a partir de la segunda guerra mundial y del concilio vaticano II se ha producido una evolución en la naturaleza de las relaciones entre el Estado y laiglesia.









Antecedentes

Desde mediados del siglo XVIII, las reformas borbónicas iniciaron en la Nueva España un conflictivo proceso de reubicación del lugar que debía ocupar la iglesia en el proyecto de Estado propuesto por los reformadores ilustrados. Durante la segunda mitad de ese siglo los reyes borbones tomaron una serie de medidas con respecto a la iglesia que agredieron demodo flagrante a vastos sectores de la población novohispana. Las principales fueron la expulsión de los jesuitas, el control de la administración del diezmo, la supresión del fuero eclesiástico y la intensificación de la desamortización de las propiedades eclesiásticas. De todas las medidas optadas por la corona la que tuvo mayor repercusiones fue la “Real cédula sobre enajenación de bienes raícesy cobro de capitales de capellanías y obras pías”, con la cual la corona española consolidaba el pago de los vales reales que había emitido a costa de la iglesia y de todos los que dependían de esos capitales.
Todo esto fue más que el inicio del proceso de secularización que llevo primero a la sociedad novohispana y luego a la mexicana, a una serie de cruentos enfrentamientos con respecto allugar que debía ocupar la iglesia en los diversos proyectos de nación que se establecieron luego de la prolongada lucha de independencia. A todo lo largo del siglo XIX el debate tuvo al menos tres vertientes: los partidarios de la integración de la iglesia en el nuevo Estado independiente, siguiendo la tradición regalista española de los Habsburgo, cuya forma histórica había sido el Real Patronato,en el cual la iglesia participaba más o menos equitativamente del poder distribuyéndose las funciones sobre la sociedad; la de los partidarios de la integración de la Iglesia al Estado y subordinándose a éste, al estilo de los reformadores borbones; y la del primer liberalismo, que establecía la separación de la iglesia y el Estado, pero que le daba un amplio margen de libertad. De las cualesMéxico opta por la separación de la iglesia en las funciones del estado, así como en la limitación de su injerencia y control en las mismas, sin embargo esta postura desencadeno el constante conflicto de intereses entre los principales benefactores del recién independizado país.
En una serie de eventos que abarcaron una centuria, las relaciones entre el Estado y la iglesia en México tuvieron momentosde mucha agresividad por la ya menciona colisión de intereses que provocaron: la reforma de Valentín Gómez Farías, la desamortización de los bienes eclesiásticos, la nacionalización de los bienes, la separación jurídica entre la iglesia y el Estado, la inexistencia jurídica de la iglesia, el conflicto religioso de los cristeros y el establecimiento del llamado modus vivendi entre el Estado y la...