Un origen poco común.

A través de los ojos de un niño el mundo es muy diferente. Todos los niños tienen miedo de lo que les acecha bajo sus camas. Temen a lo que se esconde en sus armarios o les espía por la rendija deuna puerta entreabierta.

Un doctor te diría que los niños son más perceptivos que los adultos. Ellos pueden ver cosas que los ojos de un adulto no pueden captar. Cuando creces, te vuelves ciego alos peligros que se arrastran y reptan a través de la oscuridad. Los niños pueden ver lo que realmente está ahí. Pueden ver a los monstruos.

Si pudieras mirar, solo por una noche, a través de losojos de un niño, sabrías cuán real es en verdad ese miedo. Si pudieras ver de nuevo las cosas que solo recuerdas débilmente de tu infancia, imagina lo terrible que sería. ¿Puedes recordar esas nochesde insomnio, acurrucándote bajo las sábanas, temblando y sufriendo escalofríos, temeroso de moverte, temeroso de hacer ruido, temeroso de respirar?

Esas son las noches que los adultos olvidan. Lasnoches en las que te tapas completamente con las mantas para que los monstruos no puedan verte. Las noches en las que aguantas la respiración, para que los monstruos no puedan oírte. Las noches enlas que permaneces tan inmóvil como puedes, para no atraer su atención. Sé que recuerdas esas noches.

La única cosa que puede protegerte es la luz. La luz brillante. Duermes con la luz encendida.Eso lo hace seguro. Eso significa que no pueden atraparte.

Los adolescentes están en mitad de todo esto. Todavía tienen la sensación de que hay algo en la oscuridad, pero tratan de convencerse a símismos de que es solo su imaginación. Les resulta embarazoso dormir con la luz encendida. Han olvidado que la luz es lo único que puede mantenerles a raya.

Mientras estás sentado ahí, frente alordenador, ¿crees que la luz de la pantalla será suficiente para mantenerles lejos?

Lo siento, pero no lo es.

Ahora date la vuelta, mira detrás de ti con los ojos de un niño, e intenta no...