Una Vida Para No Repetir

Sentada en una silla color azul, Luisa Marín, barranquillera de 68 años, con cabello blanco, ojos color miel y un rostro lleno de arrugas recuerda un episodio tan dramático como lo fue haber vividocon el hombre que fue su esposo, al cual amo, odio y hoy tan solo está grabado en su memoria como un mal recuerdo.
Esta señora vivía en el barrio Alfonso López ubicado al sur occidente debarranquilla; era una mujer muy atractiva que cautivaba todas las miradas de los muchachos vecinos de la cuadra, no era para menos pues tenía un cabello largo hasta la cintura color castaño oscuro, sus ojos eranbastante expresivos, su cuerpo era delgado y su calidad humana irradiaba por donde ella pasaba.
“Yo era una mujer muy linda, me asediaban mucho los muchachos, pero me quede con el menos indicado ytodo porque me deje endulzar el oído, asegura Luisa Marín*, levantando su mirada hacia el techo.
Todo comenzó en marzo de 1965, cuando luisa se cruza con un hombre llamado Luis Sandoval quien seencuentra en una tienda muy popular del barrio donde ella llega por un mandado; luisa con apenas 20 años de edad entrelaza algunas miradas en este hombre de 23 años que es poco atractivo.
“Cuando vi aLuis fue como si cupido me hubiera flechado, sentí cosas tan bonitas en ese mismo instante, algo así como cosquillitas en la panza” y con sus ojos llenos de brillo al recordar este momento, suspiraprofundamente.
Aquel hombre estaba acompañado por un primo quien le sirvió de paloma mensajera llevándole recados a Luisa, la mujer que había captado su atención desde esa primera vez que cruzaron susmiradas. Al pasar dos días el primo logro una cita a solas; Luis en esa cita cautivo el corazón de luisa halagándola con sus hermosas palabras, tanto así que decidió proponerle que fueran novios.Luisa asombrada porque le parecía demasiado apresurada la propuesta de Luis, decidió aceptarla, porque en el fondo ella sentía una atracción hacia él. Luis era el hombre más romántico, y con cartas...