Variedades

-“ Es un problema muy difícil y complejo, porque forman parte de esta “histérica sociedad” en la que vivimos, pero estos pacientes deben saber dónde estamos y que les podemos ayudar a salir adelante.No deben sentirse “bichos raros” y cuanto antes acudan a nosotros, el tratamiento y la resolución del caso serán más sencillos.".

El profesional debe saber muy bien que el estigma aflora cuando seduda de la eficacia de los tratamientos psicosociales. Duda que se origina al presuponer que el trastorno mental obliga irremisiblemente a quien lo padece a la improductividad, volviéndolo perezoso einevitablemente irresponsable. El profesional debe saber muy bien que el estigma no desaparece cuando se fía lo fundamental del tratamiento a devolver la confianza, dar oportunidades y acompañar enel tránsito que va del aislamiento y la inactividad, a la integración autónoma y la productividad.
El profesional que lucha contra el estigma es celoso en informar siempre con exactitud yobjetividad. Permanentemente se exige manejar conceptos técnicos y hacer valoraciones cada vez con mayor rigor. Se mantiene a igual distancia del paternalismo que de la frivolidad. Muestra una visión positivasobre la problemática y sobre quienes la padecen sin sobredimensionar sus limitaciones. Enfatiza las posibilidades de cambio sin recrearse en las dificultades. Resalta los avances que se producen sinponer atención selectiva en lo que no se ha podido conseguir.
Hemos de pensar si la mejor y más eficaz medida que un profesional puede poner en marcha para reducir el estigma no es, estar losuficientemente cualificado como para promover intervenciones cuya eficacia controle y extinga conductas que puedan facilitarlo. Me pregunto si no se lucha denodadamente contra el estigma cuando se logradotar a estas personas de las conductas necesarias para vivir con normalidad. Cuando se rehabilita en ellas la capacidad de cuidarse, de vivir en familia, de relacionarse, de trabajar... De que sirve...