Varios

Querida Amiga: Solo te puedo decir…. Hola y …..adiós….
Donatello.

El grito de una mujer resonaba en la cabeza de Donatello….

Ese día me desperté asustado por el sueño que había tenido.

Mi nombre es Donatello, tengo 23 años y nací en Medellín, Colombia; estudio literatura en Cambridge. Viajo cada dos semanas a New York City para ir al 31-12 Union St, a estudiar salsa con un profesorde las Antillas (centroamericanas) llamado Amaury Alvear, es un hombre maduro y experimentado que ha trasegado por los vericuetos a los que lleva una vida poco ordenada, sin muchos afanes, ni citas para cumplir. Es un ser increíble, con un gran talento y mucho para enseñar, haberlo conocido realmente me ha mostrado un género musical novedoso para mí y también fascinante.
Luego de mis leccionescon Mauro (como le dicen sus amigos mas cercanos) voy a Lincoln Center a estudiar en Julliard School.

Un día mientras caminaba por “Little Italy” un sector bastante turístico y relevante de la gran manzana, me contrataron para cantar en un bar; canté una canción llamada “Ahora quién” de Marc Anthony. Ese lugar, estaba repleto de personas y allí, vi a una mujer hermosa….era italiana, lo supeporque la escuché hablar durante la velada… su nombre era………

Al otro día, me desperté y creí que era un sueño, pero me di cuenta de que era real, ya que amanecí mareado y con los ojos enrojecidos y me sentía algo ansioso.
Siendo el medio día, un amigo me llamó para decirme que había una emergencia, mis padres habían muerto en un accidente aéreo, al igual que mis bisabuelos fallecieron en elaccidente donde pereció el famoso cantante argentino de tango: Carlos Gardel el 14 de junio de 1.935.

De inmediato viajé al lugar del accidente, casualmente en Medellín, el velorio fue en la iglesia de San Lucas y a los días, tuve que retomar mi rutina y volví de regreso a Cambridge.
Bastante agobiado por la pérdida de mis padres, escribí un libro acerca de mi experiencia con ellos, como eran y quesentí a su lado, ya que además de mis hermanos, eran la única familia que tenía hasta el momento… tal vez….

Cuando volví a Estados Unidos, terminé o mas bien finalicé de escribir mi libro camino a Boston, iba en el tren 7409 de Amtrak desde Penn Station hasta South Station; cuatro horas de viaje y luego a estudiar y defender mi novela, frente a algunos de los mayores intelectuales del mundo.Me calificaron mi texto en 3.8, era un poco baja la nota, sin embargo estaba feliz. Era un sentimiento ambiguo: la dicha de haber culminado, llegado a la meta propuesta y la tristeza por abandonarlo, por no pensar mas en sus personajes, los espacios, la trama, en fin todo el universo que significa enfrentarse a un libro; porque cuando se escribe como cuando se lee, se experimenta una doblesensación, al término de la tarea, difícilmente identificable.

El “New England Aquarium”, recién había abierto, al darme cuenta, inmediatamente fui a visitarlo; al entrar, la vi… a la chica italiana que había visto en new york; estaba ahí, parada, mirando a los pingüinos miniatura, cogida de la mano con alguien; ese alguien me miró de reojo y vi su latente mirada, sentí como sus ojos, del carmesí masintenso que había visto, palpitaban de ira, porque estaba poniendo mis “ojos en su chica”; voltee y subí al último piso para ver el “Giant Tank” y vi dos tortugas nadando, cogidas de la aleta y la recordé: cabello castaño, ojos de diferente color: verde y azul, al igual que los míos; de estatura mediana, un poco mas baja que yo, pero siempre vestía tacones; además de una bella blusa azul marinoque la hacía confundir con el océano en su mayor esplendor. En ese instante, se me acercó y me dijo: ”perdón, mi novio es muy celoso, además de que es nuestra primera cita; podrías perdonarlo? Le respondí… que sí obviamente.

Le pedí su número telefónico y le pregunté dónde vivía; por desgracia, en New York, en el 3-2-8 de la 55St entre tercera y segunda avenida, cerca del Río Hudson.

Al...