Via Humeda

LIMA ME COBRÓ

Por Fabiola Risco Gil



Heriberto, con ese nombre me pusieron cuando recién tenía diez años. Quizás porque así se debió llamar mi padre. Recuerdo que antes de ser bautizado solome gritaban y decían “cuy”. Las razones eran obvias: soy bajito, gordito y trigueño. En Apurímac eran detalles que no pasaban en vano.

Estoy ahora viajando rumbo a Lima ya tengo 21 años, miro porla ventana del autobús los paisajes que se abren paso de la sierra a la costa, al lado de mi asiento esta una señora que abre y cierra la boca no le escucho nada, algo me está diciendo pero no leentiendo nada. Me extiende la mano con una cajita de chicle, le agradezco y lo abro ¡Vaya! Recién escucho todo, la mujer me dice en perfecto castellano: “¡Abre la boca muchacho! se nota que recién vas aLima tus oídos estaban tapados”. Le sonrío y continuo viendo como se pierde las chacras frondosas y se abre paso los arenales, este viaje es mi única esperanza en ser alguien en la vida porque unprovinciano sin padres, ni familia no tiene más esperanzas. ¡Tengo que surgir!

Por fin llego a Lima es más grande de lo que pensé, tengo solamente una maleta y un bolso lleno de ilusiones. Se me acercaun señor con bigotes y sombrero, me dice: “Soy taxista. ¿A dónde te llevo?”; le respondo: “quiero ir a buscar habitación”. Me contesta, interrumpiéndome: “Habla bien, no te entiendo, ¿Qué estádiciendo, pe?”. En ese momento me di cuenta que le había respondido en quechua. Con mucha vergüenza baje la cabeza, mirando el suelo me fije que El llevaba unos zapatos de cuero, como usaba el capataz de lahacienda, y yo unas ojotas remedadas de caucho, subiendo la cabeza El llevaba un pantalón color caqui y yo un pantalón remendado que me había regalado el cura de la capilla de pueblo cuando teníadiecisiete años, fue el mejor regalo, mejor dicho fue el único regalo que he recibido en toda mi vida. La voz del taxista interrumpe mis ideas: “Habla pues cholo pa sonso. ¿pa, qué vienes a Lima?”. Yo...