Yendry

Yendy Sánchez y Juan Salas son dos primos que gracias a un talento dudoso lograron
aparecer en la plana de algún diario local de Estado Zulia, Venezuela. Se trata de dos
personajes improbables quevivieron toda su vida en el humilde Barrio Obrero.
El don de estos jóvenes no radica en el canto, la actuación, la danza, la escritura y mucho
menos en su capacidad de oratoria (¿quién necesita talesdotes?), sino en su habilidad para
burlar la seguridad en actos públicos. Su mayor ambición era subirse a un escenario,
interrumpir un evento, dar un breve mensaje, hacer alguna gracia y ser ​
vistosdurante ​
15
segundos ​
(tiempo suficiente para ser grabados por alguna cámara de televisión, dejar
perpleja a la audiencia, ser retirados por los no siempre ​
amables guardias de seguridad y, en
elmejor de los casos, captar la atención de una eventual “​
chamita”​
). Estos pintorescos
personajes competían entre sí frenéticamente para medir cuál de los dos alcanzaba el mayor
grado de popularidad.La barra de competición de estos oportunistas subía cada vez más alto, convirtiendo la
rivalidad fraterna en un extraño e irreverente arte del entretenimiento. Interrumpir un
programa de televisión alos nueve años, punto para Yendry. Colgarse de los pantalones de
Enrque Iglesias durante un recital, punto para Juan. Robarle la corona a Miss Venezuela y
“auto-coronarse” en el escenario (algo que másde una -y unohabrá sabido anhelar), punto para Yendry. Interrumpir un concierto
subiéndose al piano de Franco D`Vita, punto para Juan. Sacarle el
micrófono a Alejandro Sanz para pedirle a Hugo Chávezque deje
cantar en su país a este artista, punto para Juan. Infiltrarse en un
acto político de Chávez, punto para Juan. Robarle el icónico
sombrero venezolano al líder de la oposición HenriqueCapriles
durante la última campaña política, punto para Yendry. Atravesar la
cancha del estadio Pacheco Romero suspendiendo el partido UA
Maracaibo contra Boca para abrazar a su ídolo Juan Román
Riquelme,...