“a estosalumnos la cabeza no les da para más”, "hay que darles a estos alumnos solo los contenidos básicos porque no les da la cabeza"

Cuento “la fiesta de los animales”


Aquí empieza el cuento de Don Truán un bello pavo real y sus amigos, la pandilla de animales. Don Truán tenía amigos muy muy diferentes, desde el galloKiriko, hasta la pata Livia, el búho Sebastián, los ciervos Juan y Ana y un pez llamado Luis. Cada uno de ellos destacaba por una cosa diferente:
Don Truán, el pavo real, tenía una gran cola que cuando ladesplegaba nadie podía dejar de mirarla, el gallo Kiriko tenía una voz que cuando la alzaba (kikirikiiiiii) todos quedaban en silencio, Livia la patita nadaba de tal forma que a todos ayudaba acruzar el lago, el búho Sebastián tenía los ojos tan grandes que nada se le escapaba de la vista, los ciervos Juan y Ana corrían tan veloz que nadie les veía y el pez Luis hacía unos movimientos con laboca que a todos hacía reír.

Un día decidieron hacer una fiesta para celebrar su gran amistad. Al gallo Kiriko se le ocurrió ir a visitar la Taconera de Pamplona y realizar allí una gran meriendacon música y así conocerían otros animales con los que compartir su alegría.

Sebastián el búho dijo: ¿Uu uu uu pero nos gustara la Taconera?

Livia la patita dijo: cua cua cua como no nos va agustar si está situado en un parque en el centro de Pamplona y es muy bonita porque yo fui con mi mamá cuando era pequeña.

Truán el pavo real exclamo: ¡a mi me parece una buena idea! Así enseñaré atodos mi gran cola.
¡si si si!.- dijo el ciervo Juan, ¡yo iré corriendo tan veloz que me adelantaré a todos!

Pero todos se quedaron en silencio cuando vieron que el pez Luis estaba llorando sinconsuelo. Todos le preguntaron que le pasaba y Luis les respondió que el no podría ir porque los peces se mueren si no están en el agua puesto que es su medio para respirar.
Todos se quedaronpensativos, querían ir a la Taconera pero estaban tristes porque Luis no podía ir.

Ana el ciervo hembra, que era muy lista se le ocurrió una gran idea:
¡ya se! Podemos meter a Luis, el pececito, en una...