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La cara
La cara es el reflejo de nuestro estado de salud físico y emocional. Cuando estamos cansadas, un buen lavado
levanta el ánimo, refresca la mente, nos deja livianas, rejuvenecidas y nuestro cutis se pone mejor.
¿Pero, qué involucra una buena limpieza? Hay dos tipos: la del día a día, que remueve la contaminación del
aire, el polvo y el exceso de grasitud; y la limpieza profunda del cutis,que debe hacerla un especialista.
La limpieza del día a día
Según la cosmetóloga Susana Castex, del Instituto Femme, lo importante es considerar el tipo de piel para la
elección del producto adecuado. Además, hay que tratar de no lavarse demasiado la cara durante el día
para no agredirla ni desequilibrar el pH del cutis, dejándola excesivamente grasa.
Para una piel normal a mixta, es preferible unjabón sin mucha concentración de aditivos, y lo ideal es uno que
tonifique. Para la piel grasa, es mejor un jabón con substancias más secantes. Y para la piel seca, un jabón más
nutritivo y que humecte más.
La temperatura del agua
Sí, en un primer momento, el agua caliente puede parecer cómoda, pero después puede ser un desastre para la
piel porque estimula a las glándulas a que produzcan excesode grasa. La piel se reseca y deshidrata, y busca
estabilidad produciendo más grasa.
Si el agua es muy fría, provoca un choque térmico con la piel, que puede causar, en el mediano plazo,
modificaciones en su estructura. Lo ideal es usar el agua en la temperatura natural.
Cómo enjuagarse la cara
Después de lavarte la cara, no la refriegues con una toalla. La fricción fuerte estimula la producciónexcesiva
de grasa. Cuando se retira la humedad de la piel de la cara con una fricción fuerte, la piel entiende que le está
faltando hidratación y automáticamente produce grasitud.
Lo recomendable es secarse apenas − con un pañuelo o carilina −, tocando ligeramente la cara para que el
agua se absorba, y dando toques leves para estimular la circulación.
Ejercicios: abdominales
1. No te pongas lasmanos en la nuca
Mantené las manos a los costados de la cabeza o cruzadas sobre el pecho. Contrae el abdomen y subí el
cuerpo ligeramente sin doblar el cuello, que debe estar en línea con el tronco. Colocar las manos en la nuca
sólo te causará dolores en la columna y no te dará ningún resultado.
2. La regularidad es fundamental
Los músculos abdominales son como cualquier otro grupo muscular: debenser ejercitados algunos días y
tener descanso otros. Si los trabajas diariamente, podes producir el efecto contrario. Descansa por lo menos 48
horas entre cada sesión. Tres días por semana son suficientes.
3. No hagas muchas repeticiones seguidas
¿Quién dijo que es necesario hacer 1000 repeticiones seguidas para tener una panza dura? Vas a terminar
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trabajando el cuello y no el abdomen. Repetir20 veces cada tipo de abdominal es suficiente. Alterna las series
de ejercicios diferentes, descansando un poco entre ellas. Si queres aumentar la intensidad y desarrollar el
músculo, podes trabajar con pesas.
4. No uses los músculos del muslo
Aunque ayuden a subir, estos músculos no hacen ningún favor. Evita las elevaciones de las piernas, lo que
sería poco efectivo y podría causarte muchaslesiones. Hace abdominales siempre con las piernas dobladas
(flexionadas) y los pies apoyados. Trata de sentir que estás apretando los abdominales y fíjate que no estés
haciendo fuerza en los músculos del muslo.
5. ¡Respira!
Soltá el aire cuando contraés e inspirá cuando relajes. Respirando de la manera correcta, la intensidad del
ejercicio aumenta de forma espectacular.
6. ¿Te duele? ¿No estáfuncionando?
La prueba más evidente que no estás haciendo correctamente tus ejercicios abdominales es cuando no ves los
resultados por más esfuerzo que hagas. Si los ejercicios no son hechos correctamente, también corrés el riesgo
de lastimarte. El cuello es uno de los más perjudicados, ya que casi todo el mundo tiende a doblar la cabeza al
hacer estos ejercicios.
Si estás haciéndolos de manera correcta,...