10 bases prácticas para un cine con carácter de insurgencia

10 bases prácticas para la consolidación de un cine histórico con
carácter de insurgencia.
1. Un cine histórico con carácter de insurgencia debe nacer bajo la premisa
de que el pasado no construye a la historia, sino que es el presente quien
define la noción del pasado que queremos reconstruir: La Historia, debe verse
como una posición crítica ante una situación particular ocurrida en eltiempo y a
partir de esa postura se determinará la “reingeniería” de la misma. Cambiar la
mirada y no al objeto de estudio es el lineamiento base para la construcción de
una Historia que insurja. No se trata de hablar de negros, mujeres, indios, pardos
o cualquiera de los grupos antes llamados “subordinados”, sino de establecer el rol
que estos actores ejecutaron en el desarrollo de los sucesosa reconstruir y
posibilitar la ampliación del espectro de análisis desde un grupo de aristas
distintas a las que plantea la historiografía clásica cuando narra sólo desde el
Gran Héroe (Miradas en caleidoscopio y no en catalejo). Una película histórica con
carácter de insurgencia debe convertirse entonces en un gran “fresco” en el que
se evidencian con rasgos muy definidos las distintasposturas de los actores
sociales que participaron del acontecimiento seleccionado para narrar y no debe
conformarse con establecer, a través de pequeños gestos o algunos extractos de
discursos panfletarios o moralizantes, la visión que tiene el autor (o investigador)
de dicho acontecimiento.
2. La construcción de un filme y la reconstrucción de un hecho histórico son
métodos análogos: Pararealizar un proceso audiovisual se debe “deconstruir”
primero para luego construir. Se toma el guión y se convierte en etapas reales de
ejecución (escenas para la producción, planos para el rodaje, etc.), se definen
locaciones, número de veces que un personaje aparece en una misma locación, el
tiempo en que se ejecutan las acciones y otros aspectos que “obligan” al director a
producir los elementospara la construcción de su discurso narrativo de una
manera completamente distinta a como se lee en el guión de trabajo, para que,
luego de haber “rodado” cada una de las piezas de su rompecabezas fílmico,
pueda elaborar lo que en cine se conoce como “diégesis” (el mundo –recreado por

el autor dios- en que las situaciones y eventos narrados se suceden) en su
proceso de montaje. Eldiscurso histórico se maneja de la misma manera: el
investigador se remite a las fuentes (documentales, orales, presenciales o de
cualquier otra índole que puedan ser validadas), se organizan para estructurar una
narración lo más objetiva y coherente posible (hasta donde, y aquí acuñaremos un
término antropológico para aclarar este punto, el carácter “ethic” del investigador lo
permita) y seestablece el Ensayo Histórico (que a final de cuentas es una
reconstrucción ficcional –recreado por el autor dios- de un hecho con bases reales
validadas por una investigación).
3. El contenido ha de privar sobre la forma: Lo insurgente es sinónimo de
Independiente. Si la independencia no se logra por estar atado financieramente a
alguna casa productora, debe buscarse por la vía de los contenidos.Es la
información y cómo se maneje lo que va a impactar o no al espectador, no los
recursos con que se produzca la película. Cualquier producción modesta, si está
bien contada, cumplirá el cometido de lograr la identificación con el público al que
se dirige. La factura del proyecto no debe ser obstáculo para el proceso de
comunicación que establece la película con su audiencia. Es preferiblerealizar un
cortometraje bien narrado que un largometraje cuya historia se diluya en artilugios
holiwoodenses para captar la atención del espectador. Propuestas narrativas
como las de Lars Von Trier en el filme Dogville (2003), o las del venezolano Diego
Rísquez en Bolívar Sinfonía Tropikal (1980), son claros ejemplos de este precepto.
4. Entrar al circuito de exhibición de las grandes salas...