17 Ingleses Envenenados
Aquel largo episodio, lejos de pensar enalgún alivio para ella, dejaba el hondo pesar arrastrado hasta el puerto de Nápoles en un mar de lágrimas continuo. En efecto, visitar al Papa la alejaría de su Riohachanatal y le haría conocer la novedad en el carácter voluble de los italianos, quienes al ver el cuerpo flotando de su coterráneo, mostrando el mínimo estupor, que nisiquiera los pollitos encantados a lo largo del mulle que les daban la bienvenida nuevamente a su terruño, les despertaban el mínimo interés. Pero un incidente clave enla vida de Prudencia Linero la llevaría de la muerte a la vida: Diecisiete piernas blanquecinas en sucesión simétrica le harían estremecer y pensar en una galeríacárnica dispuesta en sacrificio, despertando una conmoción y abandonando el hotel más idóneo para ella. Sería un domingo inolvidable: El cura andrajoso y pedigüeño; elpasar a través de callejuelas infernales y el ver finalmente el espectáculo de los estudiantes del Trinity College. La larga espera de la ilusión perdida de ver alPapa en la residencia veraniega de Castelgandolfo, la encerraría en la habitación rezando diecisiete rosarios por el eterno descanso de los jóvenes y horrorizada en unpaís “donde ocurrían demasiadas cosas al mismo tiempo”.
Fuente: http://es.shvoong.com/books/novel-novella/1838103-diesisiete-ingleses-envenenados/#ixzz2BO2ELS2E
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