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fuentes arabo-islámicas y de varios
y completos estudios que a ellas
remiten, nos muestran el papel central que ha ocupado esta ciudad no
sólo en la historia, sino también en
el imaginario andalusí. Lo que no
encontramos en las fuentes araboislámicas es la asociación de Toledo
con las ciencias ocultas. Dicho de
otra manera, el "Toledo mágico" es
cristiano y judío, no musulmán.
Por razones detiempo y espacio
no me ha sido posible en esta ocasión detenerme en todos los elementos legendarios y maravillosos asociados en las fuentes arabo-musulmanas con la ciudad de Toledo.
Pero no quiero dejar de recordar la
famosa Mesa de Salomón encontrada por los primeros conquistadores
musulmanes y sobre la que tanto se
ha escrito, así como el espejo mágico destinado a anunciar la llegada
del enemigo oese otro espejo que
permitía ver los siete climas del
orbe y del que algunas versiones

añaden que fue construido por
Salomón. A las murallas de Toledo
se atribuyen también propiedades
específicas81, entrando dentro de la
categoría de defensas mágicas que
protegen el recinto del mundo exterior. Las fuentes árabes recogen en
diversas ocasiones la existencia de
una piedra, a la que no dan nombre,cuya introducción en una ciudad
provoca la lluvia. Al-Qazwini recoge en el epígrafe que dedica a
Toledo la existencia en dicha ciudad
de una de esas piedras. También se
destaca la prolongada conservación
del trigo en la ciudad de Toledo82,
así como la existencia de tierra
comestible, pues, dicen las fuentes
árabes, en Toledo existe una tierra
que se mezcla con harina, sin que se
note la diferenciaentre ambas porque son productos de la misma
especie; una vez amasadas juntas, se
hacen fermentar, luego se cuece la
masa y se come sin que provoque
rechazo alguno. Esa tierra era
exportada a Egipto, Siria e Iraq83.

______________________________________
81

Para todo ello véanse los apartados correspondientes en el estudio, de obligada consulta, llevado a cabo por Julia Hernández Juberías, Lapenínsula imaginaria: mitos y leyendas sobre alAndalus.
82
Hernández Juberías, La península imaginaria, pp. 331-2 y p. 292.
83
Dolors Bramon, El mundo en el siglo XII, p. 156. Véase también Teresa Garulo, "Comer barro
(Nota al capítulo XXX del Kitab al-muwassà de al-Wassa')", Al-Qantara VIII (1987), pp. 153-164.

60 –

MUJERES ANDALUSÍES:
DE LA HISTORIA AL PRESENTE
Manuela Marín
CSIC, Madrid

En el mesde abril de 2005, la
Asociación de Amigos del Toledo
Islámico tuvo la gentileza de invitarme a participar en su ciclo anual
de conferencias, en el que hablé
sobre la historia de las mujeres
andalusíes.
No era ésta mi primera experiencia en tratar de difundir, a un nivel
general, los resultados de mi trabajo de investigación sobre ese tema.
Desde que, en 2000, publiqué mi
libro Mujeres enal-Ándalus, he
tenido la fortuna de poder presentar
públicamente alguno de los resultados de ese trabajo de investigación
en varias ocasiones. Utilizo muy
conscientemente el término “fortuna”, porque es raro que al historiador –sobre todo si se ocupa de
siglos oscuros y lejanos– se le
ofrezca la posibilidad de contrastar

sus conclusiones más allá de los círculos académicos en los que habitualmente semueve y en los que
obtiene reconocimiento y aprobación o discusión y polémica; situaciones todas ellas que muy escasamente trascienden las páginas de
los órganos de expresión profesionales: revistas especializadas, obras
colectivas, índices de impacto, etc.
Al recibir ahora una nueva invitación de la Asociación de Amigos
del Toledo Islámico –esta vez, para
colaborar en su revista– me ha parecido quequizá podía ser de cierto
interés reflexionar ante los lectores
de Tulaytula sobre mi experiencia a
la hora de transmitir los resultados
de mi investigación a un público no
“profesional”, un público no de historiadores o arabistas, sino de personas con intereses mucho más

– 61

generales, pero a la vez condicionadas tanto por los mensajes difundidos en los medios actuales de
comunicación como...