4

Páginas: 28 (6998 palabras) Publicado: 8 de julio de 2015
4
Cuando recobro la cordura, abro los ojos y alzo la mirada a la cara del
hombre que amo. Christian tiene una expresión suave, tierna. Frota su nariz contra la
mía, se apoya en los codos y, tomando mis manos entre las suyas, las coloca junto a mi
cabeza. Sospecho que, por desgracia, lo hace para que no le toque. Me besa los labios
con dulzura mientras sale de mí.
—He echado de menos esto —diceen voz baja.
—Yo también —susurro.
Me coge por la barbilla y me besa con fuerza. Un beso apasionado y
suplicante, ¿pidiendo qué? No lo sé, y eso me deja sin aliento.
—No vuelvas a dejarme —me implora, mirándome con seriedad a lo más
profundo de mis ojos.
—Vale —murmuro, y le sonrío. Me responde con una sonrisa
deslumbrante: de alivio, euforia y placer adolescente, combinados en una miradaencantadora que derretiría el más frío de los corazones—. Gracias por el iPad.
—No se merecen, Anastasia.
—¿Cuál es tu canción favorita de todas las que hay?
—Eso sería darte demasiada información. —Sonríe satisfecho—. Venga,
prepárame algo de comer, muchacha, estoy hambriento —añade, incorporándose de
repente en la cama y arrastrándome con él.
—¿Muchacha? —digo con una risita.
—Muchacha. Comida, ahora,por favor.
—Ya que lo pide con tanta amabilidad, señor… Me pondré ahora mismo.
Al levantarme rápidamente de la cama, la almohada se mueve y aparece
debajo el globo deshinchado del helicóptero. Christian lo coge y me mira,
desconcertado.
—Ese es mi globo —digo con afán posesivo mientras cojo mi bata y me
envuelvo con ella.
Oh, Dios… ¿por qué ha tenido que encontrar eso?
—¿En tu cama? —murmura.
—Sí.—Me ruborizo—. Me ha hecho compañía.
—Qué afortunado, Charlie Tango —dice con aire sorprendido.
Sí, soy una sentimental, Grey, porque te quiero.
—Mi globo —digo otra vez, doy media vuelta y me encamino hacia la
cocina, y él se queda sonriendo de oreja a oreja.
Christian y yo estamos sentados en la alfombra persa de Kate, comiendo
con palillos salteado de pollo con fideos de unos boles blancos deporcelana y
bebiendo Pinot Grigio blanco frío. Christian está apoyado en el sofá con sus largas
piernas estiradas hacia delante. Tiene el pelo alborotado, lleva los vaqueros y la
camisa, y nada más. De fondo suena el Buena Vista Social Club del iPod de Christian.
—Esto está muy bueno —dice elogiosamente mientras ataca la comida.
Yo estoy sentada a su lado con las piernas cruzadas, comiendo vorazmentecomo si estuviera muerta de hambre y admirando sus pies desnudos.
—Casi siempre cocino yo. Kate no sabe cocinar.
—¿Te enseñó tu madre?
—La verdad es que no —digo con sorna—. Cuando empecé a interesarme
por la cocina, mi madre estaba viviendo con su marido número tres en Mansfield,
Texas. Y Ray… bueno, él habría sobrevivido a base de tostadas y comida preparada
de no ser por mí.
Christian se mequeda mirando.
—¿No vivías en Texas con tu madre?
—Su marido, Steve, y yo… no nos llevábamos bien. Y yo echaba de menos
a Ray. El matrimonio con Steve no duró mucho. Creo que mi madre acabó recuperando
el sentido común. Nunca habla de él —añado en voz baja.
Creo que esa es una etapa oscura de su vida de la que nunca hablamos.
—¿Así que te quedaste en Washington a vivir con tu padrastro?
—Viví muypoco tiempo en Texas y luego volví con Ray.
—Lo dices como si hubieras cuidado de él —observa con ternura.
—Supongo —digo encogiéndome de hombros.
—Estás acostumbrada a cuidar a la gente.
El deje de su voz me llama la atención y levanto la vista.
—¿Qué pasa? —pregunto, sorprendida por su expresión cauta.
—Yo quiero cuidarte.
En sus ojos luminosos brilla una emoción inefable.
El ritmo de mi corazón seacelera.
—Ya lo he notado —musito—. Solo que lo haces de una forma extraña.
Arquea una ceja.
—No sé hacerlo de otro modo —dice quedamente.
—Sigo enfadada contigo porque compraras SIP.
Sonríe.
—Lo sé, pero no me iba a frenar porque tú te enfadaras, nena.
—¿Qué voy a decirles a mis compañeros de trabajo, a Jack?
Entorna los ojos.
—Ese cabrón más vale que vigile.
—¡Christian! —le riño—. Es mi...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • 4
  • 4
  • 4
  • 4
  • 4
  • 4
  • 4
  • 4

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS