70 Semanas
Hace dos mil quinientos años, el ángel Gabriel se le apareció al profeta Daniel y le dijo: “Debes saber y tener la perspicacia de que desde la salida de la palabra de restaurar y reedificar a Jerusalén hasta Mesías el Caudillo, habrá siete semanas, también sesenta y dos semanas. Ella volverá y será realmente reedificada, con plaza pública y foso, pero en los aprietosde los tiempos” (Daniel 9:25).
Evidentemente, el ángel estaba comunicando a Daniel el momento específico en que llegaría el Caudillo escogido por Jehová. “Mesías el Caudillo” aparecería al final de 69 semanas (483 años) contadas a partir del año 455 a.E.C., fecha en la que saldría la palabra de reconstruir Jerusalén (Nehemías 2:1-8). ¿Qué sucedió al final de ese período? El evangelista Lucas locuenta: “En el año decimoquinto del reinado de Tiberio César, cuando Poncio Pilato era gobernador de Judea, y Herodes era gobernante de distrito de Galilea [29 E.C.], [...] la declaración de Dios vino a Juan el hijo de Zacarías en el desierto. De modo que él entró en toda la comarca del Jordán, predicando bautismo en símbolo de arrepentimiento para perdón de pecados”. En aquel entonces, “el pueblo[estaba] en expectación” de la llegada de Mesías el Caudillo (Lucas 3:1-3, 15). Aunque las muchedumbres acudieron a Juan, él no resultó ser dicho Caudillo.
Hacia octubre del año 29 E.C., Jesús de Nazaret acudió a Juan para que lo bautizara. Este dio testimonio y dijo: “Vi el espíritu bajar como paloma del cielo, y permaneció sobre él. Ni siquiera yo lo conocía, pero El Mismo que me envió abautizar en agua me dijo: ‘Sobre quienquiera que veas el espíritu descender y permanecer, este es el que bautiza en espíritu santo’. Y yo lo he visto, y he dado testimonio de que este es el Hijo de Dios” (Juan 1:32-34). Cuando se bautizó, Jesús se convirtió en el Caudillo ungido, es decir, el Mesías o Cristo.
En efecto, el prometido “caudillo y comandante [para] los grupos nacionales” resultó serJesucristo. Y cuando examinamos sus cualidades como caudillo, percibimos de inmediato que sobrepasan por mucho los requisitos que se esperan hoy de un líder ideal.
Y debes saber y tener la perspicacia de que desde la salida de la palabra de restaurar y reedificar a Jerusalén hasta Mesías el Caudillo, habrá siete semanas, también sesenta y dos semanas. Ella volverá y será realmente reedificada, conplaza pública y foso, pero en los aprietos de los tiempos” (Daniel 9:24, 25).
14 Estas sí que eran buenas nuevas. No solo se reedificaría Jerusalén y se restauraría la adoración a Dios en un nuevo templo, sino que “Mesías el Caudillo” se presentaría en un momento concreto. Y todo, en el transcurso de “setenta semanas”. Dado que Gabriel no hizo ninguna mención de días, se entiende que no seríansemanas de siete días. De haber sido así, las “setenta semanas” solo hubieran abarcado 490 días, es decir, un año y cuatro meses; sin embargo, la predicha reconstrucción de Jerusalén “con plaza pública y foso” se prolongó por mucho más tiempo. Por tanto, se trata de semanas de años. Varias traducciones modernas apoyan la idea de que cada una de ellas dura siete años. Por ejemplo, se mencionan “setentasemanas de años” en las notas de las versiones de Scío de San Miguel y de Evaristo Martín Nieto. La Biblia de Torres Amat dice: “Se han fijado setenta semanas de años para tu pueblo y para tu santa ciudad”. La versión Bartina-Roquer ofrece la misma lectura.
15 Según las palabras del ángel, las “setenta semanas” se dividirían en tres períodos: 1) “siete semanas”; 2) “sesenta y dos semanas”, y 3)una semana. Eso correspondería a 49 años, 434 años y 7 años respectivamente, que ascienden a un total de 490 años. Es de interés que la versión de Mariano Galván Rivera dice que Dios ha fijado “setenta semanas de años que hacen cuatrocientos noventa, en favor de tu pueblo y de tu santa ciudad”. Después de setenta años de destierro y sufrimiento en Babilonia, Dios favorecería a los judíos de un...
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