Años después de Enron

Seis años después de ENRON:
la nueva cara de los capitalismos

Olivier Pastré
Economista y profesor de la Facultad
de Ciencias Económicas de la
Universidad de Paris VIII
E-mail: opastre@noos.fr

Michel Vigier
Economista e investigador
E-mail: mv@amirdgestion.com

ODEON N" 4

Michel Vigier
Un día todo estará bien,
esa es nuestra esperanza.
Todo está bien hoy en día,
esa esnuestra ilusión
Voltaire

¿Cuan lejano parece diciembre de
2001? Ese momento en donde, en forma brutal -relámpago de tormenta en
un cielo claro- Enron, la estrella del
capitalismo norteamericano, designada cuatro veces en el curso de los
últimos cinco años como "empresa
norteamericana del año" por la revista
Fortune invocó la protección de la ley
de quiebras y reveló a sus pequeñosaccionistas, a sus asalariados y al resto
del mundo (anestesiados, de otro lado,
por el espejismo de Internet) más de
cincuenta desviaciones respecto del
modelo supuestamente arquetípico
de la empresa del siglo xxi. Se sabe
lo que vino después: 4 000 millardos
de valor bursátil esfumados del mundo en el curso de los primeros ocho
meses de 2002, o sea casi cinco veces más que con ocasión del crackde
1987, es decir, el equivalente del PNB
del Japón.
Seis años después, es tiempo de
hacer un balance de los progresos
que se han obtenido después de esta
advertencia, que debe considerarse
saludable en materia de gobierno de
empresa. Para establecer ese balance,
dos tipos de cuestionamientos deben

ser abordados. El primero, y el más
sencillo, hace relación con la pregunta "¿qué se hahecho desde entonces?". El segundo, más general y más
determinante para el porvenir, puede
ser formulado de la siguiente manera:
"¿los capitalismos nacionales van en
camino de converger hacia un modelo único o, por el contrario, se están
arraigando cada vez más en sus identidades vernáculas?". De la respuesta
a esta segunda pregunta dependen, en
forma crucial, las reformas que imponen lasrespuestas aportadas a la primera.
"¿De dónde venimos? ¿Qué somos? ¿Adonde vamos?". El título que
le dio Gauguin a uno de sus cuadros
más hermosos (observable en el Museo de Boston) retrata bastante bien el
camino intelectual necesario para esclarecer la evolución de la diversidad
de los capitalismos contemporáneos.

I. ¿De dónde venimos?
¿Qué se ha hecho en estos seis años
para evitarque se multipliquen y se
agraven las desviaciones de la mundialización? Bien poco, después de
todo. Y sin embargo, el sistema sigue
funcionando. Se ha creado más valor que en cualquier otro período de
la historia del capitalismo. A cambio,
por cierto, de desigualdades crecientes. Pero hay que constatar que el balance es "globalmente positivo".

Para tratar de tomar un poco de
distancia, seimpone comenzar reconociendo que el nexo entre lo micro
y lo macro nunca antes había sido tan
estrecho como ahora. Las empresas
(o, por lo menos, una parte de las mismas), convertidas en entidades mundiales a golpes de compra de sus competidores, rivalizan con los Estados y
su imbricación con las problemáticas
macroeconómicas es cada vez mayor. El gobierno de empresa no puede pues, menos quenunca, limitarse a
los cuestionamientos sobre el rol del
consejo directivo y sobre la supuesta
objetividad de los "administradores
independientes". La época de los informes Viénot o Bouton quedó atrás.
Dado que juegan un papel social cada
vez más grande, las empresas ya no
pueden limitar su vigilancia a las solas consideraciones respecto del equilibrio de poder en su seno. Ya pasó
la épocaen donde "lo que es bueno
para General Motors es bueno para el
mundo entero", y se ha entrado en una
época en donde "lo que es bueno para
el resto de los Mundos es bueno para
l'Oréal y para Microsoft". De allí la
necesidad, inspiradora de nuestra reflexión, de interrogarse sobre lo que
ha cambiado en el curso del período
reciente en el gobierno mundial. Dos
cambios de fondo parecen...