AA.EL PODER MEDICO
Curiosamente la bibliografía sobre el poder médico es muy escasa; le ocurre lo que a todos los otrosd aspectos sociales de la profesión médica, que nos son casi por completo desconocidos. Ciertamente, se debe a causas muy concretas.
El triunfo en el siglo XIX de la concepción cientñifico-natural de la medicina hizo que la historio grafía médica clásica orientara la mayor ymejor parte de sus esfuerzos al estudio de la historia de las ciencias médicas: anatomía, fisiología, patología, terapéutica, etc.
Sólo con posterioridad a la Segunda Guerra Mundial ha cambiado significativamente el panorsma. El auge de las ciencias sociales empezó a repercutir tanto en la medicina como en la historia, y en consecuencvia orientó de nuevo la investigacion en historia de lamedicina. Ësta fue perdiendo poco a poco su antiguo estatuto epistemológico de “ciencia natural”, para adquieir el de “ciencia social”. La historia por su parte se ha reconvertido hacia los temas sociales y a tal efecto ha puesto a punto los nuevos métodos de la historia social.
Influida por estos dos caontecimientos, la historia de la medicina ha empezado a redefinir sus objetivosa de acuerdo con losnuevos objetivos de la medicina, y a utilizar los nuevos métodos de la historia social. En consecuencia, ha dirigido la investigación hacia nuevos temas, muy apartados de la clásica historia de saberes.
Estos temas están siendo fundamentalmente tres: la historia de la salud y la enfermedad, la historia de la profesión médica, y la historia de la asistencia sanitaria. El tema del cual vamos aocuparnos es el segundo de los enumerados, la historia social de la profesión. El poder médico es poder profesional.
Dentro de la historia social de la profesión médica, el tema del poder médico empezaó a interesar a partir de 1968. Como es conocido, la revolución de Mayo del 68 fue fundamentalmente intelectual y en concreto metodológica. Entonces empezó a repetirse con insistencia que laciencia y la cultura no son sólo sistemas de ideas sino tambi´ñen sistemas de poder.
Ningún fenómeno se entiende adecuadamente por el simple análisis de la lógica interna de sus ideas, sin preguntarse por la funcion real de estas ideas en la estructura económica, política y social. Juanto a la clásica historia de las ideas y de las instituciones toma fuerza ahora la historia social, que intenta irmás allá de la lógica interna del discurso ideológico en busca de su lógica social o lógica del poder, mediante el análisis de sus determinaciones económicas y políticas; el resultado es la denominada “ historia de mentalidades”.
Nos proponemos utilizar esta metodología. Nos permitirá comprender cómo en el discurso médico se mezcalan “saber” “deber” y “poder”; o también cómo la medicina es, a lavez que diascurso cientñifico, discurso moral y discurso político. El conjunto de estos tres discursos configura un orden social, que es es el que hoy se suele conocer como “orden médico”. Mediante ello, la medicina se convierte en potente intancia de control social y en instrumento de poder.
Parece que las relaciones entre saber y poder resultan obvias por sí mismas. Jacques Léonard publicó ellibro “La médicine entre les savoirs et les pouvoirs”. Más problemática puede resultarnos la relación entre poder y deber. Y sin embargo, es incuestionable a paertir, cuando menos de Zur Genealogie der Moral, de Nietzsche. Desde entonces, todo estudio histórico de la moral tiene que optar entre el método de la “historia” clásica y el propio de la “genealogía”.
El primer método tiende siempre aconsiderar las normas morales como incondicionales y ajenas al paso y al peso de la historia y a los intereses de los hombres. El deber funciona como instancia última y absoluta, desigada del “poder”; o como es tópico decir desde los tiempos de Tomasio y de Kant, el mundo del deber interno o de la “ moralidad” es por completo distinto del horizonte del deber externo o de la “legalidad”. Pero...
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