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CULCyT//Jorge Salas–Plata Mendoza

Con Ciencia
SUSTENTABILIDAD: NECESIDAD DE UN NUEVO DISCURSO
El discurso de la sustentabilidad ha llegado a afirmar el propósito y la posibilidad de lograr un crecimiento económico sostenido a través de los mecanismos del mercado, sin demostrar la capacidad de éste para integrar las condiciones de sustentabilidad ecológica, es decir, sin señalar la capacidaddel mercado para dar un justo valor a la naturaleza y la cultura; para integrar las externalidades ambientales, disolver las desigualdades sociales y proteger los derechos de las generaciones futuras al beneficio de los recursos naturales. La teoría económica de mercado no cuenta con medios objetivos para medir las equivalencias en el intercambio de valores de uso. Los precios son signos falsos dela escasez de recursos y del potencial de la naturaleza; no pueden servir como indicadores para una asignación racional de los factores productivos ni para incluir y por tanto contabilizar los costos de los impactos ambientales (Leff, 2002). La propuesta neoliberal busca asignar derechos de propiedad y precios a los bienes y servicios de la naturaleza para que las leyes del mercado se encarguende ajustar los desequilibrios ecológicos y las diferencias sociales, para alcanzar un desarrollo sostenible con equidad y justicia. De esta forma, los potenciales de la naturaleza son convertidos a capital natural y el trabajo, los principios éticos, los valores culturales, las potencialidades del hombre y su capacidad inventiva, son reducidos en forma de capital humano o lo que es peor, a mano deobra barata como ventaja competitiva (Leff, 2002). El proceso de modernización, guiado por el crecimiento económico y el progreso tecnológico, se ha apoyado en un régimen jurídico fundado en el derecho positivo, forjado en la ideología de las libertades individuales, que privilegia los intereses privados. Este orden jurídico ha servido para legitimar, normar e instrumentar el despliegue de lalógica del mercado en el proceso de globalización. La racionalidad económica guiada por los fines del progreso y la eficiencia, ha llevado a la desvalorización de la naturaleza y a la degradación de los valores humanos. Como producto de todo lo anterior, la problemática ambiental surge como el signo mas elocuente de la crisis de la racionalidad económica que ha conducido al proceso de modernización yque implica una obsesión por el crecimiento económico guiado por el libre mercado (Leff, 2002). Un problema fundamental que agrava la situación ambiental de los países en desarrollo lo constituye la deuda externa y la marginación, ya que los recursos se vacían por los conductos de una deuda contraída con altas tasas de interés. Según las cifras preliminares de la Comisión Económica para AméricaLatina y el Caribe (CEPAL), elaboradas con la información y estimaciones oficiales proveídas por los gobiernos, el monto de la deuda externa de México aumentó de 130 mil 531 millones de dólares en 2004, a 131 mil 737 millones al finalizar 2005. Durante los primeros cinco años de ésta década, el crecimiento del producto por habitante en México fue de 0.44 por ciento en promedio anual, una tasa sieteveces menor a la de 3.76 por ciento observada en el quinquenio precedente, indica el balance preliminar de la CEPAL sobre la evolución de las economías de la región en 2005. En contraste, la economía mexicana figuró en el primer sitio de América Latina por la recepción neta de inversión extranjera directa entre 2001 y 2005, con un ingreso de 76 mil 159 millones de dólares, por arriba incluso de labrasileña, la cual captó 71 mil 412 millones de dólares en el mismo periodo. Pero ese

CULCyT//Julio-Agosto, 2008

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Año 5, No 27

ingreso de divisas no se reflejó cabalmente en el bienestar de la población. Según los indicadores de la CEPAL, la economía mexicana fue una de las de peor desempeño de la región en cuanto al comportamiento del producto por habitante, por arriba de Haití,...