ABOGADO

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Z25n

Zamora, Rubén I.
La nueva integración centroamericana: “muerta la integración, viva la
integración” / Rubén I. Zamora. – – 1a. ed. - - San José, Costa Rica:
Lara Segura y Asociados, 2003.
35 p. ; 18 x 25 cm. (Serie: Colección Prospectiva, volumen 3).
Auspiciado por el Centro Interamericano para el Desarrollo Humano.
ISBN:
9968 - 9998 - 5 - 7 (Obra completa)
ISBN:
9968 -9998 - 8 - 1 (Volumen 3)
1. AMÉRICA CENTRAL - FORMAS DE GOBIERNO. 2. POLÍTICA.
I. Título. II. Serie: Colección Prospectiva.

Elaborado por:
Rubén I. Zamora

Artes e impresión:
Lara Segura & Asoc.
(506) 256-1664

La responsabilidad de este texto es del autor. Sin
embargo, debo reconocer que sin las discusiones
desarrolladas en el “Círculo de Copán”1, por un
grupo decentroamericanos(as), nunca hubiera podido plantear lo que aquí escribo. En algunos casos, el hilo de mi reflexión no es otra cosa que la representación resumida de los diálogos desarrollados
por el Círculo. Sus integrantes, mejor que nadie, se
darán cuenta de ello. Específicamente debo agradecer dos colaboraciones escritas que miembros del
Círculo me hicieron llegar para este ensayo. La primera es deFernando Zumbado, y trata sobre la
agenda social; la segunda es de Jorge Nowalski, sobre la dimensión social de la competitividad. Un borrador de este trabajo fue discutido en cada país de
área, con grupos interesados en el tema. La riqueza
de las observaciones críticas que surgieron de esas
reuniones es imposible de registrar en este documento, pero lo que quedó claro es la importancia del tema yla necesidad de continuar con la investigación
y reflexión sobre él.

1 Grupo de Pensamiento Estratégico Centroamericano.

3

Introducción
En la década de 1990 las sociedades centroamericanas cerraron un período de
su historia. Los años anteriores estuvieron marcados por violentos conflictos que
afectaron directa o indirectamente a todos los países. Con el advenimiento de la
paz,reinó el optimismo y todo parecía indicar que la región se podía plantear un
nuevo desarrollo político y económico.
Medio siglo antes, la integración nació impulsada por los vientos desarrollistas que soplaban en todo el continente. Su diseño original se asentó en la homogeneidad histórica y cultural, y sobre una continuidad geográfica: el “Istmo”, excluyendo, al norte y al sur, a Belice y Panamá.El esfuerzo integracionista tuvo tanto empuje que llegó a ser reconocido como
modelo. Sin embargo, a fines de los años sesenta mostró claros síntomas de agotamiento. Las contradicciones entre los países del Istmo le restaron dinámica, y
en buena medida fueron responsables de la guerra entre El Salvador y Honduras.
A partir de ese momento ya no fue posible registrar avances importantes en elproceso integracionista. El aparato institucional de la integración y el comercio intra-regional, aunque se mantuvieron, no lograron recuperar dinámica. Finalmente, las guerras civiles de la siguiente década sellaron su destino. Desde la perspectiva de “proceso” la integración estaba muerta.
Hacia fines de los ochenta y principios de los noventa, los conflictos armados
de Nicaragua, El Salvadory Guatemala empezaron a resolverse, y las consideraciones de seguridad estratégica que habían pesado gravemente sobre Honduras y
Costa Rica tendieron a disolverse. Surgieron regímenes políticos de representación democrática. Costa Rica, que diez años antes había sido la excepción, se convertía en norma. En la región se generalizaron gobiernos conducidos o apoyados
por empresarios que, dejandoatrás los regímenes militares, planteaban nuevos esquemas de desarrollo. Por otra parte, el panorama internacional era favorable: dinamismo en la economía mundial, fin de la guerra fría y fuerte disposición de los
países desarrollados a cooperar con el esfuerzo centroamericano.

5

La nueva integración
Centroamericana

El proceso de integración vivió no solo una resurrección orgánica,...