abraham valdelomar
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lentamente, pues tienes todo el peso del océano sobre los hombros. Pero la sirenaatraviesa mil kilómetros de agua, débil y familiar, y en el horno de tu vientre arde otra vezel juego, y te incorporas lentamente, lentamente. Te alimentas de grandes cardúmenes debacalaos y de ríos de medusas, y subes lentamente por los meses de otoño, y septiembrecuando nacen las nieblas, y octubrecon más niebla, y la sirena todavía llama, y luego, enlos últimos días de noviembre, luego de ascender día a día, unos pocos metros por hora,estás cerca de la superficie, y todavía vivo. Tienes que subir lentamente: si te apresuras;estallas. Así que tardas tres meses en llegar a la superficie, y luego unos días más paranadar por las frías aguas hasta el faro. Y ahí estás, ahí, en la noche,Johnny, el mayor de losmonstruos creados. Y aquí está el faro, que te llama, con un cuello largo como el tuyo queemerge del mar, y un cuerpo como el tuyo, y, sobre todo, con una voz como la tuya.¿Entiendes ahora, Johnny, entiendes?
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lentamente, pues tienes todo el peso del océano sobre los hombros. Pero la sirenaatraviesa mil kilómetros de agua, débil y familiar, y en el horno de tuvientre arde otra vezel juego, y te incorporas lentamente, lentamente. Te alimentas de grandes cardúmenes debacalaos y de ríos de medusas, y subes lentamente por los meses de otoño, y septiembrecuando nacen las nieblas, y octubre con más niebla, y la sirena todavía llama, y luego, enlos últimos días de noviembre, luego de ascender día a día, unos pocos metros por hora,estás cerca de la superficie, ytodavía vivo. Tienes que subir lentamente: si te apresuras;estallas. Así que tardas tres meses en llegar a la superficie, y luego unos días más paranadar por las frías aguas hasta el faro. Y ahí estás, ahí, en la noche, Johnny, el mayor de losmonstruos creados. Y aquí está el faro, que te llama, con un cuello largo como el tuyo queemerge del mar, y un cuerpo como el tuyo, y, sobre todo, con una vozcomo la tuya.¿Entiendes ahora, Johnny, entiendes?La sir
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lentamente, pues tienes todo el peso del océano sobre los hombros. Pero la sirenaatraviesa mil kilómetros de agua, débil y familiar, y en el horno de tu vientre arde otra vezel juego, y te incorporas lentamente, lentamente. Te alimentas de grandes cardúmenes debacalaos y de ríos de medusas, y subes lentamente por los meses deotoño, y septiembrecuando nacen las nieblas, y octubre con más niebla, y la sirena todavía llama, y luego, enlos últimos días de noviembre, luego de ascender día a día, unos pocos metros por hora,estás cerca de la superficie, y todavía vivo. Tienes que subir lentamente: si te apresuras;estallas. Así que tardas tres meses en llegar a la superficie, y luego unos días más paranadar por las fríasaguas hasta el faro. Y ahí estás, ahí, en la noche, Johnny, el mayor de losmonstruos creados. Y aquí está el faro, que te llama, con un cuello largo como el tuyo queemerge del mar, y un cuerpo como el tuyo, y, sobre todo, con una voz como la tuya.¿Entiendes ahora, Johnny, entiendes?La sir
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lentamente, pues tienes todo el peso del océano sobre los hombros. Pero la sirenaatraviesa milkilómetros de agua, débil y familiar, y en el horno de tu vientre arde otra vezel juego, y te incorporas lentamente, lentamente. Te alimentas de grandes cardúmenes debacalaos y de ríos de medusas, y subes lentamente por los meses de otoño, y septiembrecuando nacen las nieblas, y octubre con más niebla, y la sirena todavía llama, y luego, enlos últimos días de noviembre, luego de ascender día a día,unos pocos metros por hora,estás cerca de la superficie, y todavía vivo. Tienes que subir lentamente: si te apresuras;estallas. Así que tardas tres meses en llegar a la superficie, y luego unos días más paranadar por las frías aguas hasta el faro. Y ahí estás, ahí, en la noche, Johnny, el mayor de losmonstruos creados. Y aquí está el faro, que te llama, con un cuello largo como el tuyo queemerge...
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