abuela

Si la definiéramos a través de su carácter, seria insoportable, si fuera a través de su bondad, inalcanzable, si la definición fuera por su verraquera, imparable. En este caso hablo de Doña Leo,una señora de edad residente en la ciudad de Cali que con sus relatos acerca de sus experiencias particulares de vida nos ha permitido descubrir casi una novela, un retrato de la sociedad colombianacampesina de hace 60 años.
Madre de 7 hijos, 5 hombres y 2 mujeres, sobreprotectora a más no poder. Se ha encargado de lograr que todos a su alrededor se sientan a gusto y bien tratados en lo que hapodido, aunque su carácter no le ayude mucho a lograr su cometido. Doña Leo nació en Pupíales-Nariño hace 67 años, hija única y menor en una familia de 5 personas, tenía 2 hermanos con los cuales crecióallá en la finca donde el campo abunda de aire fresco, vegetación y vida, aunque vida no significara necesariamente disfrutarla en su máxima expresión, ¿qué es vivir cuando no te dejan hacerlo segúntus convicciones?
“Ya es hora de levantarse muchachos, se les hace tarde para ir al colegio”, era lo que decía don Ángel Campaña -el papá de los niños- siempre cuando se acercaban las 5 de la mañanade lunes a viernes, justo media hora antes de que el gallo entonara su canto por primera vez en el día. Luego de levantarse y terminar sus deberes como lo son bañarse, vestirse y comer su desayuno,los niños partían hacia el colegio normalmente y como de costumbre solo habían dos maletas en la puerta, también como de costumbre la primera en estar de pie era la hermana mayor para preparar eldesayuno de la familia y como de costumbre quedaba sola en la casa realizando las labores que haría normalmente su difunta madre.
Su carácter se hacía más fuerte en la medida que sus responsabilidadescrecían, pronto dejo de ser una niña -que en realidad nunca fue- nunca pudo disfrutar de una niñez tranquila en su totalidad y solía regañar con reiteración a sus hermanos, “Solo hacen bobadas de niños,...