ABUELOS TENEMOS
Pocos saben, cuando, como y desde donde vino el viejo. Indudablemente algúnorigen ha tenido. Los abuelos no aparecen por generación espontanea, ni porque si, como las nubes. Lo que importa ahora es que las hijas del matrimonio Mendizábal, se han provisto de un abuelo parapresentar a vecinos y amistades varias. Lo cierto es que a pesar de los chismes de las comadres y los presagios de las pitonisas barriales, la mujer de Casimiro Mendizábal, acepta la presencia de suabandónico padre, sin interrogatorios superfluos. No obstante, por un tiempo cavila sobre la conveniencia de agregar otro miembro a la familia. (para colmo no muy bien vestido). Finalmente considera quedesde hace un tiempo no se tienen noticias de otros abuelos, y que en la época de familias desmembradas y cambio de cánones sociales, no es cuestión de desperdiciar a un abuelo; aunque esté algodeteriorado y sin dientes. Y teniendo por acertado el refrán que dice “a falta de pan, buenas son las tortas”, Julia Luna Mendizábal accede a invitar al anciano a compartir los ravioles dominicales. Apartir de ese momento es que a las dos hijas de Julia, ahora devenidas en nietas, se les ocurre la peregrina idea, de que tener abuelo les otorga cierta distinción. En otras palabras, se sientendistintas a las otras chicas y chicos que no tiene abuelo. Por ese motivo el anciano es literalmente arrastrado todos los fines de semana, a una maratónica sucesión de visitas a las casas de amigos, vecinos ycompañeros de estudios de las niñas, en la Escuela N° 1 de General Rodríguez, para ser mostrado como la última adquisición familiar, por las orgullosas nietas
(Sigue en Hoja 2)
Luego deinterminables minutos y de decenas de niños que posaron para la posteridad con el disfrazado abuelo, tirándole de la barba postiza, pellizcándole los cachetes, pateándole los tobillos, el inefable anciano se...
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