Acerca de la invención de morel

A MODO DE ACLARACIÓN

Si un escrito requiere aclaración ya resulta promesa de complicación, de dificultad. Para decirlo todo de una vez: Este trabajo plantea que un vínculo sólo tiene derecho de ser llamado así, si es receptivo a lo que se le transfiere. ¿Por qué a un vínculo se le transfiere? Porque el aparato psíquico básicamente tiene como actividad primordial el transferir.
Latransferencia, entonces, propicia ese espacio “entre dos” que es un vínculo; es decir: estoy yo, estás tú y está ese espacio “entre dos” que hace que yo pueda reconocer en ti lo que hay de mí. Sigo aclarando (y esto se pone riesgoso): sólo puedo comunicarme contigo si, transferencia mediante, te silencio en ese “entre dos” para olvidarme y desentenderme de tu radical alteridad.
En este trabajo los términostransferencia-vínculo-alteridad no aparecen escritos en ningún párrafo, auque se hace referencia a ellos todo el tiempo.
Hecha la aclaración oscurecedora los invito a su lectura.

ACERCA DE LA INVENCIÓN DE MOREL[1]
(EN UN PRINCIPIO TODO ERA SIMULACIÓN)

Anoche soñé esto:
Yo estaba en un manicomio.
Después de una larga consulta con un médico,
mi familia me había llevado ahí.
Morel era eldirector.
Por momentos yo sabía que estaba en la isla;
por momentos, creía estar en el manicomio;
por momentos, era el director del manicomio.
Adolfo Bioy Casares.[2]

Estoy nervioso.
Tal vez el viaje en avión o alguna calle angosta de Roma. No sé.
Estar solo, esperando que empiece el panel, me resulta escena conocida. El tedio y cierto aburrimiento acompañarían mejor que este nerviosismo.A Dalmacio Ombrellieri[3] lo conocía de vista, aunque nunca había leído con interés sus artículos e ideas acerca de lo representativo, el simulacro y la total exterioridad de la realidad que nos rodea.
Tampoco, hasta hoy, lo había escuchado.

“Hablar de Adolfo Bioy Casares como un escritor enmarcado en la narrativa fantástica es casi una mezquindad discursiva, si me permiten la expresión. Bioyresultó un adelantado; visionario de una de las claves más paradigmáticas y revulsivas de nuestra cultura actual. La Invención de Morel, publicada en 1940, es una descripción a priori (avant la lettre si lo prefieren) de la realidad virtual y artificial que hoy deslumbra y preocupa a la intelectualidad occidental…”

Ombrellieri iniciaba su charla con frases fuertes, rotundas, un tantoalambicadas pero que no le restaban claridad a sus enunciados.

“La invención de Morel responde al insensato e inevitable deseo humano de inmortalidad, de crear una realidad en donde la muerte no exista. Es la invención de un simulacro que no reemplaza la realidad, sino que “es” la realidad.”

Cierta incomodidad invadió los cuerpos de algunos psicoanalistas sentados en la sala.
Mi lectura de “Lainvención…”se hizo efectiva durante el vuelo Bs. As.-Roma en una modesta butaca de la clase turista. Me entretuvo y alejó mi inexplicable temor a las alturas, aunque no conmovió las fibras más intimas de mi condición humana. Debo reconocer que rápidamente lo catalogué como un atractivo y bien escrito discurso psicótico, mucho más seductor que el del presidente Schreber.

“Bioy (al igual que Borges)maneja con maestría el escándalo lógico en su narración y se coloca, (como gusta decir mi querida colega Silvina Múscolo)[4], cómodamente en el casillero clasificatorio de experto en discurso fantástico; ese que instala al lector en la incertidumbre y en la duda acerca de qué realidad tomar como válida entre las varias que presenta con verosimilitud. Nos aloja (este discurso) en un lugar incómodopues corremos el riesgo de des-identificarnos con respecto a la legitimidad que rige nuestro estar en este tiempo y este espacio”

Ombrellieri hizo una pausa y tuve la certeza que él iba a ser mi profesor durante la siguiente hora en este auditorio. Le otorgué patente de hombre que sabe y me avergoncé de la superficial lectura que había hecho de la novela a más de 10.000 metros de altura....