Actitud de Sancho frente a extraños ruidos.
Sancho aconsejó al caballero a seguir caminando por el prado oscurecido por la noche para poder encontrar agua, ya que, las yerbas daban a entender quedebía de haber una fuente de agua muy cerca. No habían caminado ni doscientos pasos cuando el sonido de un gran ruido de agua llegó a sus oídos, se alegraron mucho de su hallazgo, pero esta se esfumó alescuchar unos golpes acompasados, con crujir de hierros y cadenas, pero aun así Don Quijote no se llenó de pavor.
El caballero saltó sobre Rocinante y le dijo a Sancho que lo esperara tres días ysi no volvía es porque no salió bien de esa aventura, y entonces tendría que ir a Toboso donde su señora Dulcinea y decirle que su cautivo caballero murió por acometer cosas que lo hicieran digno dellamarlo suyo.
Sancho se largó a llorar y le rogó a su señor que no fuera tras esa aventura porque era de noche y que mejor esperase a que amaneciera. Por su puesto, don Quijote se negó a la peticiónde su escudero, por lo que este urdió la treta de manearle las patas delanteras a Rocinante sin que su amo se diera cuenta y, cuando Don Quijote espoleó su cabalgadura está no pudo moverse a lo queSancho aprovechó para convencerlo de que no fuera en busca de esa aventura sino, hasta la mañana.
Don Quijote, algo molesto tuvo que esperar a que amaneciera y, para no hacer larga su espera, Sancho seofreció a contarle algunos cuentos, interrumpiéndose a cada rato y dejándola sin terminar, fastidió no poco a su amo.
Cuando aclaró el alba Don Quijote renovó sus deseos de ir tras esa aventura.Antes, Sancho había soltado las patas de Rocinante y acordó acompañarlo y no esperar tres días su regreso. Con Don Quijote conmovido, emprendieron la marcha en la dirección de aquellos espantoso ruidos.Entraron a un pequeño prado donde habían unas casas maltrechas. Fueron acercándose y al doblar un recodo, aparecieron unas piezas de batán, que eran la razón de esos ruidos.
La decepción de Don...
Regístrate para leer el documento completo.