Actividades Extraescoalres

LA SORPRENDENTE PERSISTENCIA DE LAS
ACTIVIDADES EXTRAESCOLARES
Casi todas las programaciones didácticas, de cualquier asignatura o área, tanto
en enseñanza primaria como en enseñanzas secundarias, contemplan la realización,
durante el curso, de diversas actividades extraescolares. Estas actividades se incluyen
para alcanzar diversos objetivos formativos de singular importancia. Se debeconsiderar
que muchos conceptos y enseñanzas son bastante más accesibles y comprensibles para
los alumnos cuando los ven o manejan en la realidad, y algunos es la única manera de
adquirirlos. Pensemos, por ejemplo, en la interpretación y reconocimiento de múltiples
estructuras geológicas, en el recorrido por una obra arquitectónica, en la visita a una
central hidroeléctrica o en la asistencia a larepresentación teatral de un clásico en el
Teatro Romano de Mérida. En las programaciones de los departamentos de idiomas es
muy frecuente que figure la realización de intercambios con centros de otros países y
existen también actividades extraescolares que fomentan la adquisición de otras
destrezas, algunas básicas, como la integración social. Si siguiéramos, podríamos
enumerar un elevadonúmero de fórmulas de motivación, aprendizaje, cohesión de
grupo..., ligadas a la realización de muy diversos tipos de actividades extraescolares.
La afirmación de que la realización de actividades extraescolares es necesaria
en la formación del alumnado es suscrita por la inmensa mayoría de profesores,
padres y alumnos. Sin embargo, muchos buenos profesores, muy sensatos, no realizanactividades extraescolares con sus alumnos, aunque respalden plenamente la frase
anterior. Saben que el riesgo de un percance grave, por desgracia, no es hipotético, sino
muy real, y el nivel de desamparo legal, aunque se haya reducido, sigue siendo muy
alto. Nada que reprochar.
Otros muchos buenos profesores preparan y realizan múltiples y diversas
actividades extraescolares con sus alumnos. Estosprofesores no desarrollan esa clase de
trabajo porque formen parte de una ONG, como todo el mundo cree, pero sí dedican
muchas horas de su tiempo libre a preparar y llevar a cabo estas actividades (tardes,
noches, días festivos y hasta vacaciones), corriendo riesgos evidentes y no recibiendo
ningún tipo de compensación (ni laboral, ni económica, ni de prestigio social). Algunos,
incluso, llegana colaborar económicamente en la financiación de estas actividades.
Acaso se ganen el cielo, pero no está tan claro, porque hay quien los mandaría al
infierno. O eso parece.
Estos profesores, especialmente si ponen mucho empeño y parecen estar
contentos y satisfechos con esta forma de enseñar, suelen recibir ácidas críticas de
algunos pocos, pero, por lo general, destacados, compañeros quepierden “importantes”
horas de clase para poder completar sus programaciones anuales o que deben suplirles
durante sus horas de guardia, en alguna de las clases que se han quedado sin profesor. Y
en los corrillos de la cafetería, o en los pasillos, se comentan estos importantes
contratiempos mientras “los profesores que se han ido de excursión” se divierten y
disfrutan de la alegre compañía decuarenta educados adolescentes en algún lugar
alejado de su centro. Además (en ocasiones ocurre) algunos profesores organizan las
actividades extraescolares para “disfrutar” más de un día y pernoctan (hay quien así se
lo imagina) en cámpines paradisíacos, modernos albergues y hoteles elegantes. En esos
mismos lugares, y bajo su responsabilidad, también pernoctan sus cuarenta alegres,despreocupados y juveniles compañeros de viaje. ¡Qué horas tan extraordinarias! Tan

extraordinarias que no figuran en ninguna parte, ni en sus horarios laborales ni en los
sueldos. Esas horas no tienen precio (stricto sensu).
Aquello de mandarlos al infierno, a veces, también les tienta a sus jefes de
estudio, siempre tan presionados. Esto no es nada frecuente, y si a veces prohíben
alguna...