Actos Del Habla F
Hugo García Macías
Universidad de Guadalajara / Universidad de Nuevo México
Introducción y planteamiento del problema
El problema de los universales se centra en el estatuto ontológico de las entidades
abstractas. Como es sabido, Platón resolvió el problema aceptando que dichas entidades son
independientes de las entidadesindividuales, ya que las considera existentes en el mundo de las
ideas. Ésta es la postura conocida como “realismo extremo”. La postura contraria se conoce como
“nominalismo”, la cual acepta las entidades individuales, y el menor número posible de entidades
no individuales, que además pueden ser reducidas a individuos. Hay otra postura, que trata de ser
intermedia entre las anteriores: el “realismomoderado”, que establece que los universales son
entidades mentales que encuentran su correspondencia en propiedades que son inherentes a los
objetos (Beuchot 1997: 7-8).
El problema de la ontología de los actos de habla es, por otra parte, de cuño mucho más
reciente. Se puede considerar que fue planteado desde los inicios de la teoría, pues el mismo
Austin lo pone sobre la mesa al exponer el procesode constitución de los actos ilocutivos y
observar que a éstos les es necesaria una convención, unas circunstancias apropiadas y un proceso
que sea llevado a cabo de manera satisfactoria (1975: 14-15).
En este trabajo me centraré en tres autores del campo de la filosofía analítica del siglo XX
que se dedicaron a la elucidación tanto del problema de los universales como del problema
ontológico delos actos de habla: John L. Austin, John Searle y Peter F. Strawson. Mi objetivo es
mostrar que estos autores plantearon en términos muy similares ambos problemas. Además
quiero demostrar que las soluciones que aportan no son del todo satisfactorias. Finalmente,
expondré la solución dada por Iturrioz Leza (2004) al problema de los universales, desde el marco
de la lingüística operacional y lalingüística del texto, y presentaré una propuesta de aplicación de
dicha solución al problema de la ontología de los actos de habla.
1. Austin y Searle: los actos de habla existen por convención (y los universales también)
Tanto Austin como Searle son nominalistas respecto al problema de los universales. Austin lo
formula de la siguiente manera:
Dado que usamos el mismo único nombre en cada caso,debe seguramente haber
alguna cosa idéntica ‘allí’ en cada caso; algo de lo que el nombre es el nombre; algo, por
tanto, que es ‘común’ a todos los sensa llamados por ese nombre. Llamemos a esta
entidad, independientemente de lo que pueda ser, un ‘universal’.
Dado que se admitió que las cosas que sentimos son muchas o diferentes, se sigue
que este ‘universal’, que es uno e idéntico, no es sentido.(Austin, 1989: 54, énfasis en el
original).
Austin niega que los universales existan y se pronuncia contra una postura realista
ingenua. Para Austin los universales no existen como tales, sino que son una elaboración mental.
Sin embargo, aunque el universal no existe en sí mismo, tiene cierta “utilidad” hablar de
universales.
En un cierto sentido quizás sea a veces inocente hablar de ‘universales’ ode ‘conceptos’;
justamente como es a veces conveniente hablar de ‘proposiciones’, y es muy
frecuentemente conveniente usar el ‘lenguaje de objetos materiales’ … Pero en resumidas
cuentas hay notablemente poco que decir a favor de los ‘universales’, incluso como una
admitida construcción lógica; el hombre llano no la usó hasta que adquirió el hábito de los
filósofos, y los errores a los quelleva el hábito son muy comunes y numerosos. (Austin,
1989: 59, énfasis en el original)
Podemos considerar a Austin como un nominalista en cuanto al problema de los
universales: no cree que existan en realidad sino que más bien son una forma cómoda de hablar.
En cuanto a los actos de habla se refiere, Austin los considera resultado de un
procedimiento convencional, que puede incluir cierta actitud o...
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