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Los niños del bosque

En un gran Basurero situado a la entrada de un bosque, vivían recientemente 80 hermanos y hermanas, cuyos padres, de quienes eran amados con ternura, poseían bastantes riquezas para comprarles juguetes y golosinas en abundancia, pero ellos habían muerto. Los 80 niños se pasaban el día correteando y divirtiéndose en el feo y apestoso basurero, donde iban aprendiendo aseparar basura para ganarse la vida y penetrando el duro suelo para enterrar mas basura, hasta que un día, triste y melancólico, el tío con el que Vivian se fueron para siempre al cielo, dejando solos y abandonados en la tierra a los pobres niños.
Desde entonces el niño mas grande, pues se trataba de 50 niños y 30 niñas, cuidó de su hermanitos con esmero; pero vinieron días tristes, y otros habíande venir peores, aunque no pudieran preverlo los dos huerfanitos.
Éstos tenían otro tío a quien no habían visto nunca. Vivía lejos, al otro lado de los mares; pero tan pronto como tuvo noticia de la muerte de su hermano, tío de los pequeños, apresuró su regreso y presentase en su casa. Comprendió desde luego que, habiendo muerto el padre y el tío, a poder de los niños iría todo el dinero, desuerte que si el tío conseguía desembarazarse de los 80hermanitos, la herencia iba a ser suya.
Y cuanto más pensaba en el dinero, tanto más se aficionaba a la idea de apropiárselo, hasta que vino a dar en un proyecto espantoso: matar a los niños y apoderarse de su fortuna.
Al efecto buscó a dos bandidos, a quienes pagó bien, para que se llevaran a los pequeños a la zona sur del basurero y allí losmataran.

Una hermosa mañana de sol, cuando el olor de la basura era penetrante en el olfato de todos , deslizárosle los bandidos sigilosamente por el basurero donde los niños estaban jugando y se apoderaron de ellos. Los malhechores eran robustos, fuertes y de tosco aspecto y maneras, de modo que los niños se sintieron sobrecogidos de miedo; pero como les dijeran aquellos hombres que losenviaba su tío, los pequeños no se atrevieron a replicar. Llevándolos cogidos de la mano, los bandidos acompañaron a las inocentes criaturas fuera del jardín y luego se internaron con ellas en el basurero, hasta llegar a un paraje solitario. Habían hecho una larga caminata; y los niños estaban fatigados, rendidos. Se sentaron en una pila de basura, mientras los bandidos se hacían a un lado a fin deconversar en voz muy baja.
Pero esta conversación degeneró luego en pendencia; los bandidos levantaron la voz y se hablaban a gritos, coléricamente, pudiendo los niños entender palabras que les hicieron temblar de terror.
-Se nos ha pagado para que los matemos, y hay que ganar el dinero -repetía uno de los bandidos.
Pero el otro, más humano y piadoso, replicaba:
-¿Y por qué matarlos? Dejémoslesaquí y acaso puedan encontrar donde resguardarse.
Una de las niñas se apretaba contra su hermanito mayor medrosamente.
-Van a matarnos -decía en voz baja y temblorosa.
Pero, antes de que el hermano pudiera contestarle, se acercó a ellos el bandido que se había mostrado más piadoso y les dijo con brusquedad:
-Estaos aquí quietos, mientras nosotros vamos a buscar algo que comer y un lugar dondepasar la noche.
Después que se marcharon los bandidos, los pobres niños se encontraron solos y abandonados en medio del inmenso basurero que no conocían. No atreviéndose a presentarse de nuevo ante el malvado de su tío y no teniendo otra casa, vagaron errantes cogidos de la mano y con la esperanza de encontrar donde refugiarse.
El basurero era muy espantoso, y por algún tiempo los 80 muchachos sesintieron felices viéndose rodeados de basura y arena; pero pronto el sol se ocultó en el Occidente; dejo de oler horrible y un profundo silencio se extendió por todas partes. Sin embargo, los niños soportaban valerosamente la natural fatiga, el hambre, la sed y la soledad.
Poco después, las montañas de basura crecían tan espesas, que les fue muy difícil a los pequeñuelos seguir el camino; y...