Adicción.
Por supuesto que si una persona se trata por motus propio hace más fácil la adherencia al tratamiento, pero ES TOTALMENTE NORMAL y ESPERABLE QUEEL ADICTO SE OPONGA A TRATARSE. Lo que ocurre es que su dependencia a la droga, alcohol u actividad adictiva lo hacen negar que necesite tratamiento, considerando incluso que los equivocados son suspadres o familia y no él.
Algunos padres ante esta situación deciden bajar los brazos y resignarse a que su hijo con el tiempo se convierta en un adicto que cada vez más incursiona en un camino sinretorno, desperdiciando un tiempo importantísimo en la vida de la persona.
En este sentido trabajamos con lo que llamamos técnicas de INTERVENCIÓN (grupos de orientación a Familiares, terapias deintervención o la intervención en la casa del adicto) que son estrategias familiares para el cambio con la supervisión de un profesional especializado y que permiten al adicto tomar contacto con laproblemática por la cual está atravesando, para luego pedir ayuda.
Es fundamental entender que al adicto de nada le sirven las palabras porque él vive en una especie de cápsula. Sólo pueden hacerloreaccionar hechos reales y concretos, las denominadas “situaciones límite” que le hagan ver la necesidad de un cambio. Ante un hijo adicto los padres tienen dos posibilidades para que se cure: esperarpasivamente y de brazos cruzados a que se den las situaciones límite naturales con lo negativo que esto implica, o bien, tomar el “toro por las astas” y comenzar activamente a vencer la enfermedad delhijo, en lo que denominamos situaciones limite provocadas por las intervenciones
1) Situaciones límite naturales. La familia debe esperar que se produzca un deterioro físico evidente en el adicto o...
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