Adolescentes Embarazadas
LA VERDADERA dimensión del problema, calificado por algunos de epidemia, se comprende mejor al observar de cerca las consecuencias del embarazo en una muchacha asustada. Para empezar, los cambios radicales que le esperan incidirán no solo en ella sino también en sus seres queridos.
Los adolescentes se encuentran en una fase que la Biblia llama“la flor de la juventud”, en la cual se intensifican los deseos sexuales (1 Corintios 7:36). Ahora bien, no debemos caer en el simplismo de echarle la culpa a la ausencia de métodos anticonceptivos. Todo indica que entran en juego varias cuestiones sociales y emocionales complejas.
Factores implicados
Diversos estudios revelan que muchas de estas jóvenes provienen de hogares rotos. “Lo únicoque siempre he querido es una familia normal”, suelen decir. Así pues, las familias disfuncionales pueden ser uno de los factores que propicien este problema. Un programa social de apoyo a madres adolescentes descubrió que a menudo “la relación [de estas chicas] con sus madres es inestable, y con sus padres, completamente nula”. Anita, quien dio a luz a los 18 años, recuerda que aunque tuvocubiertas sus necesidades materiales gracias al esfuerzo de su madre, siempre sintió el vacío de verse privada de su padre.
A veces, el embarazo es consecuencia directa de una violación. Para algunas de las víctimas, los abusos generan un dolor emocional que quizá se manifieste en el futuro en forma de conducta destructiva. A Jasmine, por ejemplo, la violaron cuando tenía 15 años. “Después de eso—confiesa— caí en conductas autodestructivas. A los 19 me quedé encinta.” El abuso sexual también puede producir sentimientos de inutilidad. “No me sentía digna”, se lamenta Jasmine. Anita, que pasó por una experiencia similar, dice: “Un chico abusó de mí desde los 7 hasta los 11 años. Me odiaba a mí misma y no dejaba de culparme”. Quedó embarazada con 17 años.
Por otro lado, algunas muchachas sonvíctimas de la curiosidad y del exceso de confianza. Nicole, mencionada en el artículo anterior, admite: “Creía saberlo todo y me consideraba capaz de lograr lo que quisiera. Lamentablemente, también fui capaz de tener un hijo”. Carol, quien fue madre soltera muy joven, experimentó con el sexo por curiosidad. “Pensaba que me estaba perdiendo algo”, confiesa.
Otro factor implicado es el desconocimiento delas consecuencias de la actividad sexual. Según los sociólogos Karen Rowlingson y Stephen McKay, algunos jóvenes británicos “no saben exactamente [...] qué esperar de las relaciones ni qué implica un embarazo”. Hay quienes parecen ignorar la conexión entre relaciones sexuales y embarazo. En un estudio, muchas adolescentes “admitieron que, pese a no haber usado ningún método anticonceptivo, lanoticia de que estaban encintas les causó sorpresa e incluso estupor”.
Sin embargo, el factor más influyente es el cambio de actitudes en materia sexual. Vivimos rodeados de hombres y mujeres “amadores de placeres más bien que amadores de Dios” (2 Timoteo 3:1-4). Según las investigadoras australianas Ailsa Burns y Cath Scott, existen “menos represalias sociales, religiosas y económicas contra lasrelaciones extramatrimoniales”. Tener un hijo sin estar casado ya no representa el mismo estigma que antaño. De hecho, en algunos lugares, los jóvenes consideran a su hijo una especie de trofeo o símbolo de prestigio.
Secuelas emocionales
Lo cierto es que la vida de las adolescentes que se encuentran en esta situación no se parece en nada a las fantasías juveniles. Cuando se enteran de su futuramaternidad, pasan por un torbellino de emociones. Muchas experimentan gran conmoción, y también “son habituales los sentimientos de ira, culpa y negación”, según indica la Academia Americana de Psiquiatría Infantil y Juvenil. Negar la realidad es peligroso, pues podría llevarlas a no acudir al médico para recibir el tratamiento que necesiten.
“Me asusté”, recuerda Elvenia, refiriéndose al...
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