Adopcion

matrimonio gay. Antes de continuar debo decir que tanto el matrimonio como la adopción me parecen demandas legítimas de una comunidad, en este caso, la lésbico-gay, trangénero y transexual. Sinembargo, digo que son esencialmente distintas ya que la adopción, a diferencia del matrimonio, involucra los derechos de un tercero en edad de tutela, en este caso, del Estado.

Así, por un lado, lalegalización del matrimonio homosexual, más allá de las posturas personales al respecto, involucra la decisión voluntaria y conciente de dos adultos en pleno ejercicio de sus facultades y capacidades, loscuales, buscarían adquirir derechos y obligaciones -dicho sea de paso, la mayoría de ellas ya estaban contemplados en la Ley de Sociedades de Convivencia-, por lo tanto, desde mi particular punto devista, es una demanda legítima y apoyo su legislación.

Por otro lado, el incluir la posibilidad de que estos nuevos matrimonios adopten un menor bajo la tutela del Estado en la misma legislación,parece estar orientada a satisfacer única y exclusivamente las demandas de un grupo social sin tomar en cuenta el bien superior del niño.

En el mejor de los casos, quien tendría que haber hecho lapropuesta de adopción serían las instituciones y organizaciones encargadas de velar por el bienestar de la niñez, en decir, a nivel internacional UNICEF y en México el DIF.

Sin embargo, como dijeantes, pienso que los movimientos sociales tienen todo el derecho de demandar lo que ellos creen que es justo para sí, no obstante, insisto, el papel del Estado tiene que, necesariamente, trascender elsentir de uno o varios grupos que conforman la sociedad que rige y dar una respuesta profesional a sus demandas que se oriente por el interés general de la nación.

De esta manera, una respuestaprofesional de los legisladores a la demanda de un grupo social que involucra a un tercero, hubiera sido el consultar a las instituciones y organizaciones que cuidan de éste último, en este caso, de...