Adopción De Niños En Parejas Gay

la autorización judicial de adopción de menores por parejas gay, rompe el orden constitucional al impedir en primer lugar, el libre desarrollo de la personalidad de los menores así adoptados, sometiéndolos al estigma social que presuntamente produciría la burla de sus compañeros, amigos o allegados al tener que presentar ante la sociedad padres del mismo sexo, los que por naturaleza estánimpedidos para procrear; y en segundo lugar, al forzar el criterio del representante del menor y obligarlo a decidir en contra de los sanos criterios de adopción o de sus convicciones morales y religiosas.
Seria vulgarizar el “origen del adoptado” y consentir la extinción de la especie, si de tener en cuenta el impacto psicológico de los adoptados, se tratara. No hay que olvidar que las tendencias“gay” contradicen la naturaleza de la procreación e impiden el cumplimiento de la ley de supervivencia de las especies cual es la multiplicación y cuyo incumplimiento traería su paulatina desaparición.
Por otro lado, si de tener en cuenta se tratara, que el origen de tales apetencias homosexuales no solamente es de origen hormonal y constitutivo sino también vivencial, seria un grave errorsometer a un menor heterosexual a convivir con una realidad contraria a su sentir, lo que en nada resultaría beneficiosa para su desarrollo integral.
Además, si los menores de edad sin padres que los represente son tutelados por las entidades constitucionales creadas para tal fin, sin cuyo consentimiento seria imposible entregar menores en adopción a personas que no cumplan con los requisitosexigidos, uno de los cuales debe ser seguramente, la estabilidad familiar síquica y emocional del adoptante, de tal manera que se minimice los riesgos que de cualquier índole, puedan llegar a afectar a el adoptado; seria únicamente del resorte de esa entidad estatal su escogencia, fundamentada en los criterios que la ley le impone sin que la negativa pueda ser violatoria de derechos fundamentalesdel solicitante no aceptado, a la par que su aceptación, conllevaría la violación de sagrados y prevalentes derechos constitucionales.
Es cierto que el hombre no tiene derecho a escoger sus padres naturales, pero si a escoger sus padres adoptantes, derecho que se traslada a sus legítimos representantes, no dejando de ser a pesar de ello un gran riesgo el rechazo a posteriori de éstos por partedel adoptado cuando se tratare de personas adoptantes del mismo sexo, siendo entonces el único culpable el Estado que no cumplió en forma debida con su función de tutela en el cumplimiento de los exquisitos requisitos que para este evento se imponen.
Desastroso y traumatizante sería para la personalidad de un niño con inclinaciones heterosexuales totalmente definidas y de mediano entendimientode los asuntos sexuales, tener que confesar en tantos momentos de la vida que su padre de llama Carlos y su madre Juan o que su madre se llama Cecilia y su padre Rosita.“ Cúal sería la reacción vulgar de sus compañeritos que seguramente ofendería lo mas intimo de su ser? Que despropósito..!
Entonces donde queda la garantía constitucional al libre desarrollo de su personalidad, cuando estedesarrollo es el producto de la vivencia familiar circunscrita a un solo polo (homosexual) e impuesta por el Estado? Donde queda el derecho de los niños a vivir dentro del seno de una familia, cuando estas uniones homosexuales jamás podrán ser familia en el estricto sentido de la ley constitucional?
En donde podríamos encontrar y como se desarrollaría su derecho constitucional a decidir y porquien se encontraría idóneamente representado en los casos de orfandad?
Estaría bien representado este derecho por un Estado, al ordenar en contra de toda consideración y sin importar el tamaño de la resistencia de opinión a este tipo de adopciones que nos ocupa la atención, tutelando los derechos de una comunidad, pero mancillando derechos prevalentes?
Y para no alargar, decidamos si con...