adrian y su gran aventura
Un dia a adrian le regalaron una caña de pescar para que fuera al lago. Muy ilusionado se fue el domingo a probarla y empezó a echarla, pero solo pescabaalgún pequeño pez, que devolvía al lago para que pudiera crecer
Después de varias horas tomo algo que se atoro en su anzuelo y con cuidado lo sacó para ver lo que era. Con gran sorpresavio unas estrellas parlantes pero no lograba distinguir lo que decían y enseguida quiso regalárselas a su madre para darle una gran alegría.
Pensando en lo que había encontrado, sesentó a descansar en una piedra que salía del lago. De pronto oyó una voz a sus espaldas, y al voltear vio la sonrisa de una hermosa niña que le dijo:
- Veo que has encontrado misestrellas Las había perdido y estaba muy triste, ya que todas las sirenas tenemos unas que nos regaló nuestro Rey, Neptuno.
Entonces adrian se dio cuenta de que era una sirena, y le dijo:- Yo quería regalársela a mi madre…
La sirena le contestó:
- Yo puedo traerte del fondo del mar un buen regalo para tu madre si me das mis estrellas adrian se las dio sin pensarlo dosveces y la sirena, con una gran sonrisa las tomo y nado rumbo al fondo del mar.
Adrian pensó, "igual ya no vuelve pero, claro, si las estrellas son de ella no podré quitárselas puesno me pertenecen".
Apenas terminando de pensar apareció la sirena sosteniendo una gran ostra, ¡era una ostra! La sirena le dijo:
- Cuando tu madre la abra, verás como le gustará.Dicho esto la sirena coloco sus aretes y estos comenzaron a decirle que era muy hermosa y que las demás sirenas la llamaban adrian y la sirena se dieron las gracias mutuamente y se marchoAdrian al llegar a casa dio un beso a su madre y le entrego el gran regalo. su madre al abrirlo encontró una gran y hermosa perla reluciente el pudo ver a su madre feliz.
Regístrate para leer el documento completo.