Agravios

PRIMERO.- Aduce la demandante en los conceptos de anulación identificados como primer y décimo séptimo que se debe declarar la nulidad del oficio número 500-05-2010-32353, defecha 23 de julio de 2010, toda vez que la autoridad demandada omitió señalar en concreto el precepto legal que determina su competencia de origen, ello en razón de que solo señalócomo parte de su fundamentación el artículo 7 primer párrafo, fracciones VII, XII y XVIII, de la Ley del Servicio de Administración Tributaria, publicado en el Diario Oficial de laFederación el 15 de diciembre de 1995, reformado mediante decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación el 12 de junio de 2003, sin que del citado numeral se desprendala competencia que como supuesta unidad administrativa debe tener la autoridad fiscal demandada consistente en la Administración Central de Fiscalización Estratégica, pues dedicho numeral no se desprende que aquellas atribuciones sean a su vez delegadas a otro ente o unidad que forme parte del Servicio de Administración Tributaria a fin de lograr laconsecución de su objeto. Siendo omisa en citar el artículo 8 de la Ley del Servicio de Administración Tributaria, que es el que establece el origen de la unidad administrativa queasiste al Servicio de Administración Tributaria.

Agrega la demandante que la autoridad cita como parte de su fundamentación el artículo 7 en sus fracciones VII, XII y XVIII de laLey del Servicio de Administración Tributaria, numeral que establece facultades y atribuciones a favor del Servicio de Administración Tributaria más no a favor de la autoridad quesigna la resolución impugnada, que resulta ser el Administrador Central de Fiscalización Estratégica, por lo que aquel numeral no resulta aplicable a la determinación combatida.