agroalimentaria
La salud es un derecho social fundamental, obligación del Estado, que lo garantizará como parte del derecho a la vida. El Estado promoverá y desarrollará políticas orientadas a elevar la calidad de vida, el bienestar colectivo y el acceso a los servicios. Todas las personas tienen derecho a la protección de la salud, así como el deber de participar activamente en su promoción y defensa, y el de cumplir con las medidas sanitarias y de saneamiento que establezca la
ley, de conformidad con los tratados y convenios internacionales suscritos y ratificados por la República.
Artículo 83 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
Desde 1999, con la promulgación de una nueva Constitución, se vienen incorporando cambios en la orientación de las políticas públicas en salud. Estos cambios son, en su mayoría, conceptualmente consistentes con el derecho a la salud. No obstante, su
impacto es aún insuficiente, por lo que no se ha logrado revertir el colapso del sistema público de salud. Las buenas ideas que subyacen a estas políticas se enfrentan a enormes déficit de gestión. Después de tres años, la propuesta de reforma de la Ley Orgánica de Salud (LOS), vigente en el marco de la reforma del sistema de seguridad social, fue objeto de tres vacatio legis y se estima que será sometida nuevamente a otra. Por otra parte, el sistema público de salud sigue fragmentado en las redes de asistencia a la salud del MSDS y las dependientes del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS). A pesar del inicio del proceso de adecuación de las políticas y programas del MSDS al marco constitucional vigente y del impulso otorgado al proceso de recuperación de la
red ambulatoria y hospitalaria del país, la crisis del sistema público de asistencia a la salud no ha logrado ser revertida. Para este período, se contabilizaron 346 denuncias sobre los principales problemas que afectan a los ambulatorios y hospitales venezolanos. Los aspectos más denunciados fueron: el recurrente desabastecimiento de medicamentos, insumos médicos y quirúrgicos; equipos médicos sin reparar;
problemas en la infraestructura de los establecimientos; y los relacionados con el número de camas de hospitalización y de terapia intensiva en condiciones de operatividad.
Para el período que cubre el presente Informe se realizaron 122 acciones de protestas del sector laboral de la salud, de las cuales 73 implicaron la suspensión de los servicios de atención a la salud.
Por otra parte, la política del MSDS a favor de la gratuidad no logró convertir las buenas intenciones del Gobierno en medidas concretas que permitan la plena eliminación de la práctica de cobrarle al paciente los servicios ofrecidos. Ante la insuficiencia presupuestaria que presenta la red pública de atención a la salud, se sigue cargando al usuario el costo de los insumos y medicamentos de las
intervenciones quirúrgicas o de exámenes de alto nivel de especialización.
Con respecto a los indicadores de morbilidad registrados al inicio del período en estudio y hasta el primer trimestre de 2002, la tendencia de aumento de enfermedades infecciosas como el dengue, fue revertida en el trimestre julio, agosto y septiembre del año 2002. Hasta la semana 38 (1521 de septiembre de 2002) el MSDS reportó 30.178casos de dengue, lo que representó un descenso del 48,5% en comparación con los 58.597 casos reportados para esa misma semana epidemiológica en el 2001. Sin embargo, con respecto al sarampión, enfermedad que estaba prácticamente erradicada, la situación no es alentadora: 2.492 casos fueron reportados hasta la semana 37 (814 de septiembre de 2002), destacando Falcón y Zulia como los estados más afectados.
La morbilidad de la población venezolana expresa la violación estructural del derecho a
la no discriminación. Muchas de las principales enfermedades del país, encuentran en ...
Regístrate para leer el documento completo.