agustin
Allí lleva una vida de Robinson, convencido de que no verá a nadie. Enla parte más elevada de la isla se levantan un museo, una capilla y una piscina llena de víboras, sapos e insectos. El museo tiene una gran biblioteca y una sala con un fonógrafo, un piano y unbiombo de espejos con más de 20 hojas. En los sótanos hay un cuarto escondido, de paredes celestes, con extraños artilugios en su interior y una bomba para sacar agua. El prófugo descubre también unahabitación recubierta con losas de mármol y de corcho, con unas arcadas de piedra que repiten ocho veces el mismo espacio, como si de espejos se tratara.
Una noche escucha en la distancia un sonido devoces y música procedentes del museo. Extrañado ve las siluetas de personas que bailan al son de Té para dos y Valencia. ¿Serán veraneantes que han desembarcado en la isla sin que él se enterara? Oposiblemente los constructores de todos aquellos edificios. Durante varios días ve a una mujer que se acerca al acantilado y desde allí contempla la puesta de sol. Al principio el prófugo la observaocultándose detrás de unas rocas, pero luego se deja ver. Sin embargo, aquella mujer no parece darse cuenta de su presencia. Lo que más le inquieta es que esa mujer "me ha dado una esperanza. Debo temer lasesperanzas".
Con toda aquella gente a su alrededor, la vida del prófugo se hace muy difícil. Sufre las consecuencias de unas graves inundaciones a las que a duras penas sobrevive. No tiene...
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