Ahora

Ahora


Ahora, que por unas circunstancias y pro otras parece que la cotización ética de algún político, y algún grupo político, ha tocado fondo, como las eléctricas en la Bolsade Madrid.

Ahora, que los estrategas en el juego del sacan a la luz las más o menos ciertas maniobras de compra, cambio y venta de diputados, contra los intereses naturales dequien los votó...

Ahora, que la política está haciendo, casi, tantos extraños compañeros de cama como el matrimonio...

Ahora, que las meigas han embrujado algún vocablogallego terminado en , exceptuando, eso sí, y gracias a dios, al buen caldo de Ribeiro...

Ahora, que se crítica a los centrista por haber pedido la máscara que cubría su flaco diestro,sin que exista el análisis más fundamental que lo soporte y que enseñe a distinguir a estos auditores sociales la diferencia entre ideología y estrategia...

Ahora, que secensura las nuevas coaliciones en no más, de diez ayuntamientos, olvidándose que existan muchas más con la radiografía nómicos del PSOE con gobiernos de derechas en Galicia y en el PaísVasco...

Ahora, cuando, a nivel local se quiera herir con el consabido y caduco estribillo de , por algún miembro anónimo del PSOE (antes Partido Socialista)....

Ahora, quese rasgan las vestiduras ante los pactos legítimos de minaría menores para asegurar gobiernos más estables y eficaces que los de la minoría mayor, olvidándose de la historia cercan,cuando ellos ejercieron ese derecho democrático y constitucional...

Ahora, que escuece en las propias carnes la medicina que otros aplicaron en multitud de ayuntamientos –Madridincluido- y que nadie criticó.

Ahora, me parece tremendamente actual, aquel relato de Khalil Gibran, que describía el diálogo entre una mata de hierba y una hoja de otoño: