Al Maestro
Autor Osvaldo Zabalaga V.
¡Cómo ha cambiado la vida!
Y qué grande es el progreso,
las comarcas se poblaron,
las ciudades ya parecen otros mundos,
con letreros fluorescentes
yedificios que se mecen por los aires
coqueteando a las estrellas
como platos voladores.
Y satélites ingeniosos, cuál celosos guardianes
hoy circundan el planeta, informando a los hombres
de cualquieracontecer.
La semilla del progreso, tiene buena levadura,
pues proviene de los maestros,
de su ciencia y su saber.
Se cultiva en escuelas y colegios, de los campos
a los grandes edificios y loscentros del saber.
Más ¿quién enseña?
¿Quién engendra las ideas de progreso?
Son los maestros, son los padres del saber.
Fue Cristo un maestro, un gigante en enseñar.
Fue enseñando por la vida,equidad, justicia y paz,
más los hombres como ahora, no quisieron comprender,
por eso Cristo, con sus grandes enseñanzas
en la cruz se congeló.
Hoy los maestros no se cansan, no se cansan
deenseñar.
Hoy los maestros no se cansan, no se cansan
de enseñar.
Ellos siguen la enseñanza, la sapiencia, y el amor,
de aquél que un día, por los hombres ultrajados,
fue de espinas coronado por la dichade enseñar.
Hoy los maestros no se cansan, no se cansan
de indicar.
Hoy los maestros no se cansan, no se cansan
de enseñar.
Ellos siguen las tres cosas que el gran Maestro
nos dejó.
Un mensaje,un camino y una luz.
El mensaje, es divino,
nos revela la presencia del señor.
El camino, es sagrado, es la senda de ejemplo
que todo el mundo ha de seguir.
Y la luz, es un milagro,
puesalumbra lo que los ojos nunca ven
el porqué de cada cosa,
el dolor de los que sufren,
de las madres el amor,
la bondad del mundo entero
y de los siglos el saber.
Hoy los maestros no se cansan
lastres cosas de enseñar.
Ellos siguen de aquel hombre el ejemplo
ese ejemplo de amor.
Cómo ha cambiado la vida
y que grande es el progreso,
las comarcas se poblaron,
las ciudades ya parecen otros...
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