al unísono
La obra se inicia con el personaje Mujer que está sentada en el banco. El personaje Hombre se le acerca e inicia un diálogo con ella en el que le habla del presente, del pasado y del futuro. La escasa verbalización de ella, ante las frases del Hombre se remite sólo a la palabra “Sí”. Esto lo podemos apreciar en los siguientesparlamentos:
Hombre: Con su única palabra. Sí, ha penetrado aquí, en este recinto mío. Y ¿qué más puedo desear?, y ¿qué más puedo anhelar? ¿No lo cree?
Mujer: Sí.
Hombre: ¿Se da cuenta?
Mujer: Sí.
Hombre: ¿No siente…No siente como sí entre su ser y el mío no existiera espacio, ni aire, sino un solo bulbo que late acompasadamente y al unísono?
Es significativo ese decir “Sí”, único y repetitivo de lamujer a lo largo de la pieza. El final nos lleva a conocer íntimamente a la protagonista. Sólo hasta ese momento conocemos que ella se ha ido con el personaje Hombre a compartir su mundo, lo que daría para interpretar que la protagonista queda subordinada a los deseos del personaje Hombre a pesar de que hemos percibido en ese “Sí” marcado, silencioso y reiterativo, un rechazo a la autoridad. Apropósito de esto cabría citar a Marjorie Agostín cuando afirma: …el silencio puede ser una “treta” para rechazar la autoridad.
Y a Carmen Mannarino cuando señala a propósito de estas breves piezas de la autora:
Una más desconcertante interpretación de los seres humanos: solos, desarraigados, incapacitados para comunicarse con el más elemental recurso del lenguaje diario, es común a las tres,con la diferencia de que en la primera, por la fantasía, se establece el contacto y la pieza sugiere que el mirar, entendido como amor, es una posibilidad de salvación (…) Tanto en Jamás me miró como al Unísono, lo absurdo resulta de las situaciones que ponen en contacto al Hombre y a la Mujer, todo lo cual nos hace concluir en la suposición de que para cada uno la relación acrecienta elsentimiento de soledad y de extrañeza respecto al otro.
Hay que decir que la poética del absurdo es una constante en las obras de la autora. En las situaciones ensoñadas que viven las protagonistas entraría el absurdo. Otra constante sería el tratamiento no lineal del tiempo y el manejo dislocado del espacio. El lenguaje utilizado por estas protagonistas bien podría recibir el calificativo demágico-poético expresado por Rubén Monasterios.25 En este lenguaje expresarán estas protagonistas los temas de la incomunicación y la soledad.
Las protagonistas soñadoras de Elizabeth Schön
Habiendo tomado como referencia tres de las piezas breves de la autora: Jamás me miró (1967); Lo importante es que nos Miramos (1967) y Al Unísono (1967), hallamos una constante en las protagonistas: el ensueño. Ensueñoque las hace huir de su entorno y replegarse sobre sí mismas, transmitiéndonos incomunicación con el mundo, mejor dicho con su otra parte, su sombra proyectada en lo masculino. En estas piezas las protagonistas dialogan aparentemente con personajes masculinos, a quienes la autora designa con el nombre genérico de Hombre. Esto es de gran significación para comunicarnos la alienación en la que seencuentran estas mujeres, seres extraños y silenciosos que viven el absurdo de la no comunicación. No cuenta para ellas tiempo y espacio, como tampoco identificar un nombre de persona, pues es el ensueño el medio poético para huir de la realidad cotidiana. Habría que añadir que ellas desconocen al OTRO, en este caso al hombre, porque éste las desconoce y las anula. Cabría preguntarse si no...
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