ala concha veo llegar

UNIDAD EDUCATIVA PARTICULAR MIXTA “SANTO TOMÁS DE AQUINO”
Arenillas – El Oro
LA CONCHA A LA MESA VEO LLEGAR
Autor: Carlos Román Chérrez

Un inmenso sol se ve naciendo en el horizonte,parecemarcar un camino que se ensancha a la llegada, cuando se refleja en el mar de esta comarca costera de pequeñas casas coloridas, donde ya hace algún rato brota el aroma de café, seguro no faltará elbolónde rico verde con suculento estofado de pescado.
Desde la casita azul, dos figuras se deslizan hasta la orilla del estero, y en una vieja canoa comienzan a poner cosas que de lejos no seaprecian,pero con seguridad, les serán de mucho uso, para la misión que los saca de la placidez de su hogar.
Bogando en contra corriente, avanzan a golpe de canalete, hacia aquel verduzco punto que senota ala distancia, allí iniciarán el día de la oración laboral, para llevar el sustento a su idolatrada familia.
Mirando desde la canoa se ven como mil brazos retorcidos la maraña del manglar. Unpequeñohilo de agua abre una herida cristalina en esta selva fangosa, es un caprichoso estero que lleva el salobre líquido a lo profundo de este manglar donde en esta mañana Hilario y Alfonso piensanrecogerlas conchas que se esconden en el inmenso lodazal.
En su canoa se preparan, poniéndose ropa gruesa, gorra, botas y unos polines viejos y gruesos a manera de guantes; ya dejaron encendidaunahornilla con palo santo, un cigarrillo en la boca y listos para empezar.
Ya baja de la canoa nos toca otra vez en el lodo sudar, no te olvides de los guantes o ya sabes un cangrejo hasta el dedo tepuedearrancar, riéndose a carcajadas Alfonso va gritando mientras se pierde en la maraña de mangles del plomizo lodazal.
Verás donde esta la zona de criaderos que se pueden cosechar, tu y yo hemosjodidopara que esto se haga respetar; acuérdate de todas las charlas del manejo sustentable del manglar que nos dieron en el puerto; no te olvides Alfonso, solo recolecta las conchas que ya están...