aleluya
No en vano; me exigí domar a esa parte de mí que no disfruta la lectura de una novela histórica, porque creía que sucumbía a detalles vario pintos e imprescindibles y que la trama se realiza de manera indivisible de la realidad y eso me lleva a pensar demasiado en ella, y en muchas ocasiones, me causa dolor. Entoncesoptaba por no querer recordar. Debo decir que voy con mesura y con calma, pero hasta ahora el lenguaje en el que me habla Ospina me mantiene atenta y emocionada como cualquier otra novela que escogiera para leer por mi cuenta.
El complejo mundo de la historia, de los hechos y la transgresión de los hechos que hace el autor de ellos por medio de un lenguaje poético, recargado de matices, descripcionesy acontecimientos, le dan al relato carácter y fuerza. Es fundamental apreciar como paratexto a la historia, como saber cultural, social y de identidad. Ospina, si bien construye la historia a través de una mirada sólida de poder transgresor y algunas veces catalizador, movilizador y contestatario también la construye a través de los hechos que son los que mueven a un país, a una cultura, a unaforma de bautizar el mundo.
Lo que me parece interesante en el uso directo de la historia como fuente de creación del relato es la deconstrucción que como autor hace Ospina para insertar su propia posición. Es bastante directo al proponer una mirada hacia ese mundo de antaño, en algunos casos es esclarecedora su opinión, y en otros parece que protesta del pasado:
“Solo cuando se convierte enrelato el mundo al fin parece comprensible. Mientras los vamos viendo, los hechos son tan agobiantes y múltiples que no les encontramos pies ni cabeza. O tal vez tiene razón Teofrastus, quien me dijo que lo que les den la ordena los recuerdos es que ya conocemos el desenlace, que lo vemos a la luz del sentido que ese desenlace nos brinda. Al soplo de los hechos, todo va gobernado por laincertidumbre, y los únicos seres que parecen coherentes son aquellos que, a falta de saber cómo terminarán las cosas, tienen claro un propósito que buscan imponerle a la realidad.” (William Ospina, 2012. El País de la Canela)
Esta dualidad indivisible en la obra busca que hagamos una crítica interior y exterior acerca del pasado histórico que conocemos y también por otro lado, nos persuade paraentenderlo mejor, a querer conocerlo (si es que no lo conocemos) y sobre todo, a no olvidar:
“De acuerdo con Pablo Montoya, la relevancia de la novela histórica en el contexto
de la producción estético literaria continental, no sólo por su abundancia sino
por las indiscutibles muestras de calidad, está atravesada por la naturaleza misma
de las reflexiones que dichas narraciones han estimulado.”La novela entonces presupone un saber histórico que se presenta en el relato a través de un lenguaje poético que también funciona como paratexto de la obra. Pues este, no solo delimitas un surco de entendimiento entre el autor y el lector sino que adorna y complejiza los hechos. El lenguaje poético de Ospina le da sentido a su obra (en general) yo siento que el encuentra en la poesía una forma...
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