Alex

Se señala como importante en este texto que los niños en la mayoría de los casos no establecen adecuadamente sus interacciones y que la forma en que interactúan tiene mucho que ver con sus experiencias familiares.
1. El jardín de infantes como espacio de relaciones educativas.
Poseer un lenguaje suficientemente articulado permite cada vez más amplias posibilidades de comunicación; lacreciente capacidad de comprensión verbal permite recibir impresiones cada vez mas diferenciadas.
Si se observa a los niños, en efectos, parece que cada uno de ellos a través de lo que hace o dice, a través del movimiento, el gesto, la actitud o la mímica intente definir, podríamos decir ¨construir¨, la situación.
Los elementos de novedad y de variedad del ambiente educativo estimulan la intervencióndel niño, multiplican sus posibilidades de acción, ofrecen provocaciones y estímulos, exigen también estrategias de selección y de control de los mensajes y plantean la necesidad de realizar elecciones para delimitar y definir el ámbito de acción y sus posibles significados.
Si hablamos de personas, de niños i no de maquinas, no basta considerar a la comunicación en los elementos del mensaje,código, emisión y recepción, sino que hace falta considerar el modo personal de ser y la aptitud relacional de quien emite o recibe el mensaje. La comunicación se realiza en un contexto de relaciones preferentemente no estructuradas; dado que cada acción del niño entre los demás es para los quienes la perciben una información, un estimulo, tal vez un mensaje, pero pueden permanecer suspendida, privadade la posibilidad de una respuesta si el sujeto que la cumple no la orienta internacionalmente, no la dirige hacia alguien y, sobre todo, si no la ubica oportunamente y no espera, o no pide, o directamente no acepta respuestas.
El hablar entre niños, el expresarse o comunicarse pueden presentar como fragmentos incoherentes o bien como secuencias internacionales, según el tejido relacional quecon toda la situación.
Esta distinción tiene mucha importancia porque nos permite captar diversos niveles de maduración en las actitudes relacionales del niño a lo largo de un itinerario que va del actuar entre los otros a interactuar con ellos para luego permitir que construya verdaderas y propias relaciones.
2. Actuar entre los otros, actuar con los otros.
El niño recaba de la situación loselementos para leerla, para interpretarla y, al mismo tiempo, se inserta y asume una posición, pone una imagen de si a la que tarta de ser coherente ya a la cual quisiera vinculare a, los otros; no obstante, si el contexto le parece demasiado complejo o extraño,
Difícil de comprender, no acogedor o directamente hostil intentara de todos modos mantenerse fuera.
Hay una notable diferendo decomportamiento entre un niño que actúa y uno que interactúa; interactuar implica una secuencia orientada de acciones, covalencias en el ámbito de una relación intersubjetiva definida, aunque no estable, una percepción compartida, una intencionalidad incluso limitada y extemporánea, un objetivo subjetivo, aunque no todavía un significado compartido.
Interactuar supone un intercambio, implica unarespuesta, una secuencia sucesiva de acciones dirigidas a un fin, integra al otro.
La función del jardín de infantes como espacio de relaciones educativas tienen su propio punto de apoyo en estas primeras, aunque rudimentarias, estructuradas del actuar o del interactuar.
El egocentrismo es un modo de estar con los otros, un modo elemental, inmaduro si se quiere, y en este sentido, reconocible tambiénen algunos adultos; es un reconducir a los otros instrumentalmente hacia sí, no un estado de aislamiento; no es un autismo.
La capacidad de expresarse con habilidades más o menos elaboradas en el plano verbal y en el de los lenguajes mímico-gestuales le permite entrar en varios niveles en el flujo de la comunicación.
Cada niño tiene particulares posibilidades receptivas y elaborativas de los...