Algo interesante
He descubierto una obra arquitectónica bella no sólo por sus singulares y perfectas formas que trascienden al tiempo, sino por todo aquello que dichas formas y espacios reflejan, susurrando memorias de sucesos pasados.
Se trata de un convento que se concibió y comenzó a ser construido hacia el año de mil quinientos cincuenta, cuando los españoles comenzaban a llegar a nuestratierra, acompañados de frailes cuya misión era evangelizar y enseñar al pueblo nativo la religión y los principios de la ortodoxia europea. Una magna obra localizada en el estado de Hidalgo, en un sitio conocido como Actopan, cuyo nombre deriva de la lengua náhuatl y quiere decir: "tierra gruesa, húmeda y fértil". Hoy en día, esta obra arquitectónica ubicada en Actopan, conocida como elex-convento de San Agustín de Hipona, se sabe que fue planeada y realizada bajo los mandatos de los frailes de la Orden de San Agustín. Una obra que aún mantiene viva dentro de su ser, algo enigmático y atractivo que revela el lejano pasado en el que nació y vivió.
Para comprender un poco más acerca de lo que hay detrás o en el fondo de esta maravillosa obra de arquitectura, acudimos al filósoforuso-alemán, Nicolai Hartmann....
Hartmann, en su obra Estética, habla de aquello que la Arquitectura es: "…de todas las bellas artes, la arquitectura es sin duda la menos libre: está doblemente atada 1)por la determinación de los fines prácticos a los que sirve y 2) por el peso de la fragilidad de la materia física con la que trabaja1". Dos aspectos que la caracterizan y la delimitan. Sin embargo, deacuerdo con Hartmann, dicho aspectos generan en las verdaderas obras arquitectónicas, estratos, que muestran y se abren hacia el trasfondo que guarda la obra, es decir, la Arquitectura "deja aparecer una vida que está dentro de la construcción y de la que da testimonio2".
El ex-convento al cual hago referencia posee dichas cualidades, y al conocer y vivir sus espacios, éstos hablan de una vidapasada, atrapada y fielmente reflejada en cada lugar y en cada forma. Si algo hemos aprendido, es que la Arquitectura es el hombre mismo, y en ella plasma sus sueños, sus metas y sus ideales, de acuerdo a aspectos temporales y espaciales en cada punto específico de la historia.
El primer estrato, la composición según el propósito se manifiesta por medio de la técnica constructiva elegida,obligada por la época y delimitada por la mano de obra disponible en el momento. Roca, piedra rígida y pesada, que fue diestramente maleable gracias a miles de manos del pueblo otomí. Material que fue usado cuidadosamente, y que originó pesadez obvia, necesaria para demostrar la fuerza y el poder de los conquistadores, quienes eran dioses frente a las miradas nativas e inocentes. Sin embargo, algo máspuede captarse en esas formas fuertes y sólidas: un propósito final.
La composición espacial nunca es en esta maravillosa obra una característica aplastada, minimizada o limitada por la técnica constructiva y el material que ésta incluye. El juego magistral de los espacios, sus configuraciones propias y sus distribuciones en el conjunto son únicos y sorprendentes. Cada espacio se encuentra dondedebe estar y donde debe ser. La monumentalidad magna del material usado no se hace presente en las celdas interiores y privadas del convento: espacios que invitan a la silenciosa meditación sin asfixiar nunca nuestras respiraciones. La fachada, pese a sus proporciones, no destruye al ser humano y lo obliga a alejarse. La capilla abierta, situada a un costado de la Iglesia, con aquella inmensa...
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