algunas mentiras del codigo da vinci
Sin embargo, nada de todo ello puede rebajar el resultado global de la novela, en la que la Iglesia católica aparece como una institución monolítica y férreamente controlada, dedicada a propagar una ficción a un mundo que anhela ser libre.
Esta imagen de la Iglesia católica no está ausente en la culturapopular ni se limita a la historia reciente. No hay más que acudir a la rica propaganda anticatólica, gráfica y verbal, del siglo XIX en América. Las mismas cosas, solo que en un lenguaje más florido y con una dureza más descarada cuando se dirigen contra el odiado clero.
Esta es la imagen que recorre El Código Da Vinci, y más vívidamente en su descripción del Opus Dei.
EL OPUS DEI
Parece como siel Opus Dei hubiera sido elegido en estos días para desempeñar en la cultura contemporánea el papel que la Compañía de Jesús representó durante siglos: el de un grupo férreamente organizado, controlado directamente por el Vaticano, que se ha infiltrado en las instituciones civiles con objeto de obtener poder y hacer... algo.
Los jesuitas, fundados por san Ignacio de Loyola en 1534 como una ordenmisionera y de enseñanza, se hicieron tan enormemente sospechosos que fueron expulsados de distintos países de Europa a finales del siglo XVIII, e incluso disueltos por el Papa en ciertas zonas desde 1773 a 1814. Sus supuestos hechos tenebrosos fueron destacados en la literatura anticatólica por fuentes seculares y protestantes, e incluso hoy, el término «jesuítico» puede parecer peyorativo.
Enese sentido, el Opus Dei, cierta y desgraciadamente, ha reemplazado a la orden jesuita en sectores descreídos de la imaginación popular como un símbolo de secreteo y ocultación.
Ahora bien, ciertas personas manifiestan haber tenido una experiencia negativa con el Opus Dei. Hablan de sentirse manipuladas y excesivamente controladas desde el primer momento. Para obtener un cuadro completo del OpusDei quizá podría ser importante escuchar a esas personas y tomar en serio sus relatos. Pero lo sorprendente es que las únicas fuentes que Brown emplea para describir al Opus Dei en El Código Da Vinci procedan de declaraciones negativas y decepcionadas. Este es solamente un aspecto de la historia, un aspecto que podría ser importante, pero solamente uno.
En El Código Da Vinci, Brown ofrece algunosdatos reales sobre el Opus Dei. Sí; tiene una amplia y relativamente nueva sede en la ciudad de Nueva York. Sí; sus miembros viven una vida de piedad tradicional. Sí; es una prelatura personal (enseguida lo explicaremos).
Y sí; algunos miembros practican la mortificación corporal.
Y eso es todo.
Antes de continuar, aclaremos un grave error. Silas, nuestro enorme albino asesino, aparece descritocomo un «monje», y para demostrarlo viste hábito.
En el Opus Dei no hay «monjes».
En primer lugar, no es una orden religiosa como los dominicos, benedictinos o los jesuitas. Cualquier monje que te encuentres por las calles de Roma pertenece a una orden religiosa y vive en monasterios o ermitas.
Un «monje» es un hombre que se retira de la sociedad con objeto de entregarse a Dios a través de laoración. Las mujeres que adoptan el tipo de vida monástica se llaman «monjas».
El Opus Dei es una prelatura personal compuesta por laicos y sacerdotes. En el Opus Dei hay muchos más miembros seculares que clérigos, de acuerdo con el designio divino de su fundación en 1928. Solamente quince años después, se creó la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, que permitió la ordenación de sacerdotes en...
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