ALGUNOS PROBLEMAS DE FONDO

ALGUNOS PROBLEMAS DE FONDO
Margarita Limón Luque
“Los judíos se dedicaban especialmente al comercio y a la usura, y en secreto trataban de
propagar su falsa religión. En varias ocasiones habían martirizado a niños cristianos con
horrendos suplicios. Por todo esto, el pueblo los odiaba.”
(Instituto de España, Manual de Historia de España, 1939. Fragmento reproducido por A.
Sopeña, 1994.)
“Laprudencia de esta determinación real (la expulsión de los judíos por los Reyes Católicos en
1492) no la comprenderá quien desconozca el carácter judío, su actuación hipócrita y sus
tendencias sociales que tantas veces han llevado a España a la ruina. El mundo nos da ahora
la razón, y, después de cuatro siglos, los mayores políticos adoptan el consejo de nuestros
Católicos Soberanos, expulsando de susterritorios a esta raza peligrosísima”.
(Cereceda, F., Historia del Imperio Español y de la Hispanidad, 1940. Fragmento reproducido
por A. Sopeña, 1994.

Implicaciones epistemológicas
Sin duda, si el lector ha leído con calma estos dos fragmentos que hemos seleccionado del ameno y
divertido libro de A. Sopeña se habrá sentido quizás sorprendido por su elevado contenido ideológico e
incluso nosatreveríamos a decir, adoctrinador. Hoy en día nos parecería impensable que se publicaran
textos con semejante contenido, y si se llegara a hacer, serían rápidamente denunciados por racistas. Sin
embargo, estos textos son buenos ilustradores de una característica de la historia: la transmisión de
valores, actitudes e ideologías. Si nos parecen totalmente denostables es porque los valores oficiales denuestra sociedad son radicalmente diferentes de los que estos textos propugnan. Pero ello no quiere decir
que la explicación histórica que se realice de los diversos acontecimientos históricos en la actualidad no
implique la transmisión de unos valores y una ideología, que tal vez dentro de muchos siglos, puedan
parecer inadecuados o inaceptables para los hombres del futuro como nos parecen anosotros los que se
reflejan en los fragmentos que hemos reproducido más arriba.
Si nos fijamos en la fecha en que se publicaron los textos citados, sus contenidos nos seguirán
pareciendo igualmente inaceptables, pero podremos comprender por qué se propugnaban, al menos
desde determinados sectores, los valores de rechazo hacia los judíos y de defensa del nacionalismo.
Políticamente podía ser adecuadoen aquellos momentos presentar una historia oficial que reivindicara
estos valores.
La historia, por tanto, es siempre una transmisora de valores, actitudes e ideologías. No parece posible
plantear una historia neutra u objetiva puesto que, en el mejor de los casos, el historiador siempre hace
una selección previa de las fuentes, de las evidencias a favor y en contra de sus hipótesis, paraexplicar
un determinado acontecimiento histórico. Las diversas escuelas historiográficas generan explicaciones
diferentes y se interesan por aspectos también distintos de los acontecimientos históricos.
Las interpretaciones históricas son susceptibles de ser modificadas con el paso del tiempo, no sólo a
partir de la existencia de nuevos valores e intereses –como podría ser el caso de la explicación dela
expulsión de los judíos en 1492, que hemos mencionado más arriba -, sino también a la luz de nuevas
evidencias o nuevas interpretaciones del suceso. Piénsese, por citar un ejemplo de actualidad, en la
visión hasta ahora dominante sobre Felipe II y en las novedades que aporta el reciente libro de Kamen
(1997). Estas características epistemológicas de la historia, a las que ya nos hemos referido enotras
ocasiones (Carretero y Limón, 1993; Carretero y Limón 1994, a y b), tienen importantes implicaciones
para su enseñanza.
En primer lugar, puesto que la historia es transmisora de valores e ideología que forman parte de la
identidad nacional e individual, la primera consecuencia importante para su aprendizaje-enseñanza es la
necesidad de una toma de conciencia de esta característica...