Am Rica

América – Juan pablo Villalobos

El sujeto había matado a su vecino por una discusión futbolera. La ametralladora había estado colgada como adorno en la sala de la casa de sus padres hasta que ambos murieron, en el derrumbe del Hotel Regis del terremoto de 1985.
Cuando heredo la ametralladora de su padre, junto con la casa, el sujeto la derrumbo en un closet, debajo de un montón desabanas viejas, de donde solo salió anoche, para meterle un susto al vecino, pero no para matarlo. El vecino era de América. El sujeto, del Cruz Azul.
No será casualidad que el propietario del América sea también el dueño de una televisora. Todo esto le conto el sujeto al oficial de policía en la madrugada, después de haberse entregado de manera voluntaria. Lo peor de semejante testimonio absurdo einverosímil es que era verdadero.
El inspector sorbe un primer trago del café ardiente que le acaba de servir su secretaria. El café sabe a quemado, pero el inspector lo ignora: el cree que ese es el sabor del café autentico. Cada mañana su secretaria pone la cafetera a las ocho y cincuenta para que el café esté listo a las nueve. El inspector llega, como mínimo, a las diez.
Hace dossemanas, en una discoteca del sur de la ciudad, dos jóvenes fueron asesinadas bajo el fuego de una ametralladora. Nada más y nada menos que un cuerno de chivo. Un AK-47, para ser exactos. El arma oficial del ejército de la Unión Soviética durante más de treinta años. La policía no ha conseguido capturar a los autores del atentado y algunos columnistas están agitando a la opinión pública. La cosa esseria, porque las muertas son de la clase media.
El jefe mete la cabeza debajo de la sabana y dice: Más despacio, más despacio. Están en el apartamento que el jefe alquila para poder encontrarse con sus novias. El lugar se renta por días o por semanas. Amueblado. Con tele a cable. Internet. Electrodomésticos. Servicio de limpieza. Un portero que no hace preguntas. La novia insiste, pero no haymanera: al jefe no se le para. Será el cansancio por la noche en vela, será el alcohol, será la coca. O será que el jefe, a su edad, comienza a tener otro tipo de problemas.
El jefe de policía y el inspector surfean entre la muchedumbre y se acercan povo a poco hasta el candidato. El remolino en torno al candidato esta hecho de apretones de manos, abrazos y palmaditas. También de elogios yfelicitaciones por la magnífica campaña. El jefe ejecuta el empujoncito final y se planta delante del candidato. Lo abraza de manera sobreactuada para que todos los presentes se enteren de la gran amistad que los une.



White Flamingo – Andrés Felipe Solano

El reloj era un pequeño astro que parecía alumbrar en el lobby del hotel solo para atraer a Mariela. El hombre lo llevaba en la muñecaizquierda. Era contundente y pesado como las latas de pomada de mentol que vendían en las tiendas del odioso barrio donde había nacido.
Cabello, sí. Pelo tenían los pordioseros que recogían cartones cerca de las fábricas de ropa a la vuelta de su casa. Lo de ellos era una mara seca, genital, como si llevaran un animal muerto encima de la cabeza.
A los doce años intento decolorarse el cabelloen patio pero su madre llego justo cuando tenía el frasco de agua oxigenada en la mano. Se lo arrebato y le pego una cachetada que le dejo el labio superior hinchado. Quizás por esa razón lo llevo de rubio por tanto tiempo, cuando al fin se le presento la oportunidad.
Mariela aterrizo en el oficio de negociar relojes de alta gama después de pasar por toda la cadena de trabajos para inmigrantes.Había lavado patios, repartido volantes, cambiando pañales a viejos sin dientes, servicio tragos. Encontró una nueva manera de ganarse la vida hacia diez años y ahora tenía la impresión de que por fin una época dorada estaba por llegar. Si, los buenos tiempos se aproximan.
Si los clientes tenían un carácter afable y ganas de conversar, Mariela lanzaba un pequeño anzuelo mientras señalaba el...