Amor L quido Cap tulo I
Zygmunt Bauman
"Mi querido amigo, le envío un pequeño trabajo del que podría decirse, sin ser injusto, que no
tiene pies ni cabeza, ya que por el contrario todo en él es, alternativa y recíprocamente, pies y
cabeza. Le suplico considere la admirable conveniencia que tal combinación nos ofrece a todos:
a usted, a mí y al lector. Podemos interrumpir, yo mis cavilaciones,usted el texto, y el lector su
lectura, ya que no pretendo mantener interminablemente la fatigosa voluntad de ninguno de
ellos unida a una trama superflua. Retire uno de los anillos, y otras dos piezas de esta tortuosa
fantasía volverán a encajar sin dificultad. Recorte varios fragmentos y advertirá que cada uno
de ellos se sostiene por sí mismo. Me atrevo a dedicarle a usted la serpiente enteracon la
esperanza de que algunos de sus tramos le gusten y lo diviertan."
De esta manera, Charles Baudelaire presentaba Spleen de París a sus lectores. Es una pena que lo haya
hecho. De no ser así, yo mismo hubiese querido componer un preámbulo igual o similar para lo que sigue
a continuación. Pero lo hizo, y yo sólo puedo citar. Walter Benjamin, por supuesto, eliminaría la palabra
"sólo" de estaúltima frase. Y si lo pienso dos veces, yo también.
"Recorte varios fragmentos y advertirá que cada uno de ellos subsiste por sí solo." Mientras que los
fragmentos salidos de la pluma de Baudelaire sí lo hicieron, sólo el justo derecho del lector, ya que no el
mío, decidirá si los dispersos tramos de pensamiento reunidos a continuación subsisten o no.
En la familia de los pensamientos hay enanos enabundancia. Por eso fueron inventados la lógica y el
método, y una vez inventados fueron adoptados con gratitud por los pensadores de pensamientos. Los
enanos pueden esconderse, y en medio del poderío esplendoroso de las legiones en marcha y las
formaciones para la batalla, terminan por olvidar su enanismo. Una vez que se han cerrado las filas,
¿quién notará la diminuta estatura de los soldados? Esposible reunir un ejército de aspecto temible y
poderoso alineando en formación de batalla a filas y más filas de pigmeos...
Quizás, y tan sólo para complacer a los adictos al método, debería haber hecho lo mismo con estos
fragmentos y recortes. Pero como no me queda tiempo para terminar esa tarea, sería tonto de mi parte
ocuparme del orden de las filas y dejar el reclutamiento para más tarde...En cuanto a pensar las cosas dos veces, quizás el tiempo que tengo disponible resulte poco, no a causa de
mi edad, sino porque cuanto más viejos somos, mejor comprendemos que por más grandes que parezcan
las ideas, jamás lo serán tanto como para abarcar, y menos aún contener, la copiosa prodigalidad de la
experiencia humana. Lo que sabemos, lo que deseamos saber, lo que nos esforzamos por saber,lo que
intentamos saber acerca del amor y el rechazo, del estar solos o acompañados y morir solos o
acompañados... ¿Acaso es posible racionalizar todo eso, ponerlo en orden, ajustarlo a los estándares de
coherencia, cohesión y totalidad establecidos para temas menores? Quizás sea posible, es decir, sólo en la
infinitud del tiempo.
¿0 acaso no sucede que cuando se dice todo acerca de los temasfundamentales de la vida humana las
cosas más importantes siempre quedan sin ser dichas?
Amor y muerte, los dos protagonistas de esta historia que no tiene argumento ni desenlace
pero que condensa la mayor parte del sonido y la furia de la vida, admiten esta clase de
reflexión/escritura/lectura más que ningún otro tema.
Ivan Klima dice: casi nada se parece tanto a la muerte como el amor realizado. Cadaaparición de
cualquiera de los dos es única pero definitiva, irrepetible, inapelable e impostergable. Cada aparición debe
sostenerse "por sí sola", y lo hace. Toda vez que aparecen nacen por primera vez, o renacen, saliendo de
la nada, de la oscuridad del no-ser, sin pasado ni futuro. Cada una, cada vez, empieza desde el principio,
dejando al desnudo lo superfluo de las tramas del pasado y la...
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