Amor

Romanos 3:20-28
Introducción
Esta noticia apareció en un periódico Boliviano, en Julio del año 2005.
“Luego de nueve días, la Policía asegura haber esclarecido el horrendo crimen de la niña Estéfani Mallcu, de 8 años. Ayer las autoridades encargadas de esta investigación presentaron la imagen del supuesto violador y asesino, identificado como Juan Poma, quien aceptó su culpabilidad.
Deacuerdo con los datos que proporcionaron los informantes, el lunes 4 de julio, Juan secuestró a la pequeña y la llevó a su habitación. La agresión comenzó el miércoles y terminó el mismo día con su muerte. El médico forense certificó que la menor fue violada y apuñalada 18 veces. El sospechoso llevó el cadáver, metido en una bolsa de plástico, a un barrio de El Alto, donde lo abandonó la mañana deljueves.”
 
¿Cómo reaccionas contra individuos como éste? ¿Se retuerce tu estómago y tu interior clama por justicia? Tal vez esperas que sea condenado y enviado a la silla eléctrica.
Te preguntas: ¿cómo pudo haber hecho eso?
¡YO NUNCA HARÍA ALGO ASÍ!
  
Aunque es adecuado que reaccionemos ardientemente contra la injusticia, a la vez tenemos la tendencia de compararnos moralmente con otros yllegar a la conclusión que nosotros somos mejores: ¡ESO ES ARROGANCIA, SOBERBIA de superioridad moral!
 
¿Eres arrogante? La arrogancia puede manifestarse de múltiples formas. Cuando miramos con desprecio y burla a un homosexual. Cuando comparamos el comportamiento de nuestros hijos con el de los niños malcriados del vecino. Cuando durante el conflicto con mi esposa todo lo que veo son sus faltas encontraste con mi santidad. Cuando me considero superior porque mi doctrina es más sólida, mi alabanza más espiritual, mis oraciones más elocuentes. O la otra cara de la soberbia: cuando me deprimo porque he caído otra vez y siento que Dios ya no me acepta, o cuando pienso que los demás son más amados por Dios por ser más maduros que yo o por tener mejores dones.

En todos estos ejemplos dearrogancia, el tema común es que pensamos que Dios nos acepta en base a nuestra propia justicia, cuando bíblicamente somos declarados justos únicamente al depositar nuestra fe en Jesús, y como esta declaración no depende de lo que nosotros podemos lograr entonces no queda lugar para nuestra arrogancia. Eso es precisamente lo que Romanos 3:20-28 nos enseña.
Porque Dios nos declara inocentes,exclusivamente por medio de la fe en Jesús, debemos desechar toda nuestra arrogancia

Leamos este pasaje (Romanos 3:20-28)
20porque por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de El; pues por medio de la ley viene el conocimiento del pecado. 21Pero ahora, aparte de la ley, la justicia de Dios ha sido manifestada, atestiguada por la ley y los profetas; 22es decir, la justicia deDios por medio de la fe en Jesucristo para todos los que creen; porque no hay distinción, 23por cuanto todos pecaron y no alcanzan la gloria de Dios, 24siendo justificados gratuitamente por su gracia por medio de la redención que es en Cristo Jesús, 25a quien Dios exhibió públicamente… como propiciación por su sangre, a través de la fe, como demostración de su justicia. Porque en su tolerancia, Diospasó por alto los pecados cometidos anteriormente, 26para demostrar en este tiempo su justicia, a fin de que El sea justo y sea el que justifica al que tiene fe en Jesús. [Pausa. V.27] 27¿Dónde está pues la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿La de las obras? No, sino por la ley de la fe. 28Porque concluimos que el hombre es justificado por la fe aparte de las obras de la ley.
Porque Diosnos declara inocentes, exclusivamente por medio de la fe en Jesús, debemos desechar toda nuestra arrogancia
Sólo dos puntos para desarrollar esta idea y concluir que no hay lugar para presumir de superioridad moral: (1) Por medio de la Ley somos hallados culpables (2) Por medio de la fe en Jesús somos declarados inocentes.
1.   Culpables por medio de la Ley
Como Dios es infinitamente santo,...