Amy Winehouse
El pasado sábado murió Amy Winehouse, a los 27 años por causas aún no confirmadas en su autopsia. Los elogios, crítica y reconocimientos por partedel público y fueron siempre de la mano de sus escándalos públicos, sus excesos con el alcohol y las drogas. La intérprete forma parte del Club 27, el grupo de jóvenes estrellas de lamúsica que han muerto a los 27 años de edad, como Jimi Hendrix o Janis Joplin, por tener continuas dificultades para hacer frente a la fama.
Desde pequeña, Amy Winehouse dejómuestras de su rebeldía. Expulsada de una de las escuelas de teatro a las que acudió por hacerse un piercing en la nariz a los 13 años, su biografía auguraba ya un camino rápido haciala muerte. En Estados Unidos, de hecho, su visado le fue denegado aludiendo el uso y abuso de narcóticos
El amor inspiró todas sus canciones, un amor demasiado tormentoso paraocupar centenares de páginas en la prensa sensacionalista. En su corazón llevaba tatuado el nombre de Blake Fielder-Civil, su exmarido y afortunado detonante de composiciones comoBack to black, You know I'm no good, Mrs. and Mr. Jones o Addicted, todas ellas incluidas en su disco más celebrado Back to Black (2006), con el cual la cantante se alzó con seisGrammys, entre ellos Mejor Canción del Año, por Rehab, y Mejor Álbum del Año.
Amy Winehouse tenía una voz privilegiada y propia, interpretaba con la sensualidad y seducción de lasgrandes del jazz y el soul y capturaba la atención con un discurso narrativo a la altura de muy pocos. No sólo era una vocalista genial, sino que escribía letras intensas e imaginativasque huían de los lugares comunes y nacían de su propia experiencia vital. ‘Just friends' es una instantánea de una vida al borde del precipicio recorrida por un doble sentido.
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