Análisis de la implementación del Plan Ceibal en Uuruguay
A comienzos de los años setenta, cuando se hablaba de políticas de comunicación era inevitable no remitirse a tres puntos fundamentales: la necesidad de garantizar pluralismo, democracia y participación, la acción promotora del Estado, y la orientación hacia la integración regional. A partir de estos planteos, se comprende por políticas de información y comunicación a lasestrategias y prácticas de ordenamiento, regulación, gestión, financiamiento y formulaciones de planes relativos a las actividades info-comunicacionales. (Martín Becerra, 2005)
El proyecto de la Sociedad de la Información se asienta sobre tres ideas fuerza: la liberalización, la desregulación y el fomento a la competitividad internacional de las actividades info-comunicacionales, entendiendo quelas mismas tienen gran influencia en la reestructuración productiva y en la correspondiente generación de riqueza en el mundo. Estas ideas pilares de la Cumbre demuestran la clara intención de convertir a la información y la comunicación en meras mercancías y al ciudadano en nada más que un consumidor de información. Por distintos intereses económicos y políticos, parece ser conveniente alentar aldesarrollo de las sociedades a través de la fomentación de la infraestructura de la comunicación, tomando a la sociedad civil como consumidores pasivos. Se descuidaron, en los documentos resultantes de la Cumbre, aspectos tan fundamentales como la participación activa de la gente, la democratización de la información con todo lo que eso implica, la fomentación a la diversidad, inclusión yparticipación de grupos marginados y prácticamente como tema tabú, se evito toda referencia o mención al derecho humano a la comunicación.
Para Manuel Castells (1995), el modo de desarrollo informacional nace en el marco del salto tecnológico de los años setenta como una apuesta histórica de generación de una nueva lógica de crecimiento y acumulación de capital. Compartiendo lo que planteaCastells, autores como Claudio Katz (1998) o Armando Matelart (2002), advierten que la creciente segmentación social en el acceso a los bienes y servicios ofrecidos en el marco de la Sociedad de la Información, además de favorecer a la lógica socioeconómica dominante, expresa cuestionamientos al discurso promotor del proyecto, toda vez que la convergencia de tecnologías de información ycomunicación, en función de sus impactos productivos, tenga determinaciones socioculturales que son agresivas.
Becerra (2005), destaca que el argumento del proyecto de la Sociedad de la Información es opuesto en varios sentidos a la que inspiró el NOMIC veinte años antes. Donde el NOMIC anunciaba desequilibrios, la Sociedad de la Información veía oportunidades de cambio y modernización. De manera tal quelas políticas info-comunicacionales del proyecto de la SI tienden a orientarse a la diseminación de tecnologías, favoreciendo las condiciones para los constructores de infraestructuras y proveedores de servicios asociados a las mismas, teniendo como consecuencia de estas políticas liberales, la concentración y la conformación de oligopolios.
Estas nociones, revitalizadas con las nuevastecnologías de la información y su potencial convergente, remiten al difusionismo como modelo de políticas info-comunicacionales y fue el tema dominante de la Cumbre, con el compromiso de “convertir la brecha digital en una oportunidad digital para todos”.
El difusionismo ha sido históricamente criticado por los estudios sociales desde la gestión misma del modelo desarrollista. Las...
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