Análisis De El Tunel De Sabato
En El túnel, como en la picaresca, encontramos un narrador que se cuenta a
sí mismo en cuanto personaje que actúa. El pretexto de la narración está generado
por una situación o «caso» sobre cuyos precedentes se informa para mejor comprender
la situación actual en la que se encuentra quien se ha decidido a escribir
sobre ello. Junto al motivo germinal y a la historia precedente, con elconsiguiente
Esto es también fácilmente apreciable desde el inicio mismo de El túnel:
«Bastará decir que soy Juan Pablo Castel, el pintor que mató a María Iribarne;
supongo que el proceso está en el recuerdo de todos y que no necesitan mayores
explicaciones sobre mi persona» (I, 61). Juan Pablo Castel comparte, además,
sobre todo con Guzmán de Alfarache, el carácter confesional de los hechosnarrados,
que él mismo define como «páginas de confesión» ( I I , 64
Está claro, en cualquier
caso, que la elección de la primera persona viene impuesta por la inmediatez
de las vivencias que nutren la historia contada, pues, como ha observado
Michel Butor, cuando «tout était raconté à la troisième personne, c'était comme si
l'observateur était absolument indifférent» (1972:75), y resultaobvio que Castel
no es ajeno ni puede mostrarse indiferente a los hechos que cuenta. Desde esta
perspectiva, se comprende que también para Castel sea un «imperativo formal»
el hecho de expresarse, como el picaro, en primera persona, según indica Molho
(1972:218); y, por consiguiente, como apreció Rico en el Lazarillo, «si el yo es la
piedra de toque de la realidad, ¿qué molde más realista quela autobiografía
Más allá incluso de esa sumersión analítica, la ansiedad de Castel por encontrar
un solo lector que pueda entenderlo (otra razón, pues, que sustenta y peculiariza
la escritura), nos conduce nuevamente hasta el hecho clave; lo que Castel
pretende es que alguien entienda por qué mató a María1 2
Disponemos de un solo dato preciso para, a partir de él, seguir cronológicamentela historia; dicho dato se refiere a la fecha en que María visita la exposición
donde la conocerá Castel, dato que el propio Castel anota: «En el salón de Primavera
de 1946 presenté un cuadro llamado « M a t e r n i d a d » » (III, 64-65); este
Salón, según indica a pie de página Ángel Leiva (1989:64-65), se inaugura todos
los años el 21 de septiembre. Fuera de esta referencia, domina laimprecisión. (pag 11)
Ahora bien, como también ocurre en la picaresca, y más explícitamente en el
Guzmán, las peripecias del personaje, en el tiempo pasado de la acción, se interfieren
con las reflexiones y los arrebatos emotivos del Castel-narrador en el
tiempo presente de la escritura. Los ejemplos siguientes confirman inequívocamente
lo dicho. demás de estas interferencias del presente en elpasado, se aprecian en El
túnel similares estrategias para mantener la atención mediante el juego de las anticipaciones;
más aún, la diferenciación que establece el propio Castel, al comienzo
del capítulo X X X V I , entre «el tiempo anónimo y universal de los relojes» y el
tiempo que marcan las agujas del sentimiento y que está «lleno de cosas y de
vueltas atrás», ayuda a mejor vislumbrar lafuncionalidad de dicho recurso en los
espacios picarescos. Por lo pronto, parece lógico deducir que este tiempo psicológico
inflexiona el tiempo cronológico, alterándolo y perturbándolo; son muchos,
al respecto, los movimientos de anacronías narrativas en El túnel e, insistimos, en
la picaresca. Veamos algunos casos.
Dentro de la analepsis global que nos sitúa, desde el presente de laescritura,
en el inicio de la historia desde donde ésta se reconstruye, son muy frecuentes los
saltos en prolepsis. Ejemplificamos lo dicho. El asesinato (desenlace del tiempo
de la acción) se anuncia en los tres primeros capítulos y en el XXIX; cuando
recuerda al pianista al que obligan en un campo de concentración a comerse viva
una rata, avisa que «ya diré más adelante, si hay ocasión, algo más...
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