Análisis de la obra tridimensional

EL LENGUAJE DE LA OBRA TRIDIMENSIONAL Y N DIMENSIONAL
Antes de la Edad Media, el estudio de las esculturas, de los tapices y de las pinturas, se realizaba en Occidente con la consideración de que las obras estarían insertas en el espacio arquitectónico y como tal, eran estudiadas en relación con el contexto arquitectónico del que formaron parte subsidiaria como lenguajes menores. En lasimágenes, se continuaba la arquitectura como representación de modo de ordenar las escenas del cuadro. El tapiz y la pintura eran pensadas para un lugar determinado y en interrelación visual con él y no para tener la independencia de ser cambiado de lugar. Por ese motivo la composición se resolvía en relación con las características formales de la arquitectura como una continuidad de ella adentro delmuro. A lo largo de los siglos siguientes, la importancia que toma la imagen pictórica se reflejó en que se ha escrito más sobre el desarrollo del lenguaje en ella que sobre la arquitectura. Los estudios se desarrollaron considerando principalmente las obras en dos dimensiones (alto x ancho) e inscripto en un análisis planar, que no es más que una de las formas de estudio y registro de la imagen.Sobre la problemática de la escultura como lenguaje que se desarrolla en tres dimensiones y se goza en un transcurrir evidentemente temporal, se ha escrito menos aun que sobre el lenguaje de la arquitectura, pero las observaciones y los conceptos ya se extendieron del grupo escultórico y la expansión al espacio público de la instalación, llegando a la robótica y al arte de las biotecnologías.Plinio el Viejo (c. 23-79 d.C.) en la Historia Natural, luego de una disquisición sobre los griegos y los egipcios, atribuyó en un relato casi mitológico la creación de la pintura a la necesidad de una enamorada que ante el viaje de su amado contornea su sombra en la pared mientras su padre, el ceramista Butades, le agrega el barro dándole relieve a la sombra. De este modo, el padre crea el simulacrodel doble del desaparecido (¿muerto en la guerra?) y hace del cuerpo (plásticamente) un receptáculo para el alma (sombra).
La escultura es, como todas las creaciones del hombre, una cosa absolutamente antinatural y el primer problema que plantea es su inserción en la naturaleza, así como la incorporación del sentido. La escultura tiene la forma, densidad y peso que conforman su materialidad y esequivalente a la masa de la naturaleza. En eso se diferencia de la pintura o de la fotografía al representar un espacio sin ocuparlo más que en dos dimensiones, como un mapa. La materia plástica con la que trabaja el escultor no es para representar –en tanto emula con contrastes una forma- sino que es la forma, el volumen y el espacio al que se alude, tal vez con otra materia, pero para hacer unarepresentación, es decir, una metáfora de lo que se señala. Al plantar la forma escultórica, el realizador no solo compondrá una imagen que sostenga un equilibrio más o menos dinámico para la representación, sino que necesita que la pieza se sostenga y no se derrumbe.
La aparición de la imagen de bulto o escultura se remonta a las pequeñas piezas tridimensionales del paleolítico (30.000-25.000A.C.) como la Venus de Willendorf (Fig. 1) una pequeña forma de 11,1 centímetros de alto esculpida en piedra caliza y pintada con ocre rojo que se acomoda plácidamente en la mano que la toma. Sabemos que una de las principales preocupaciones en la creación de imágenes fue superar la inmovilidad de la imagen dando la sensación virtual del movimiento y como en las androesfinges o toros y leones aladoscon cabeza humana que se colocaban a los lados de las puertas de los palacios y templos asirios. Estas imágenes volumétricas (Fig. 2a y 2b) tenían la particularidad de poseer una quinta pata por lado de modo de sugerir la idea de estar en movimiento. La misma pulsión entre el carácter inmóvil y la necesidad del realizador –y del espectador- de satisfacerse con el movimiento que le de vida...